El jeque Abdullah Al Thani quiere convertir al Málaga en una referencia del fútbol español y europeo, y para lograr ese objetivo no ha dudado en gastarse millones de euros en futbolistas de renombre. Cazorla (21 millones, Villarreal), Toulalan (11 millones, Lyon), Van Nistelrooy (6 millones, Hamburgo), Monreal (6 millones, Osasuna), Isco (6 millones, Valencia), Buonanotte (4,5 millones, River Plate), Joaquín (4,2 millones, Valencia), Sergio Sánchez (2,8 millones, Sevilla) y Mathijsen (Hamburgo) se han unido este verano a otros que continúan de la pasada campaña, como son los casos de Baptista, que no jugará en el Sánchez Pizjuán al estar lesionado, Maresca, Demichelis... Y así hasta confeccionar una plantilla -Antonio Fernández, quien estuvo en el Sevilla, ha realizado un magnífico trabajo como director deportivo- a la que Manuel Pellegrini debe exprimir al máximo para cumplir los deseos del jeque, defraudado con el anterior técnico, Jesualdo Ferreira.

El técnico chileno tiene un plantel equilibrado, con jugadores de experiencia tanto en la Liga española como en otros campeonatos europeos, y ya en pretemporada se han visto los primeros resultados positivos. Esto ha levantado una gran ilusión en la hinchada de La Rosaleda, que ya se frota las manos a la espera de un gran año.

sin balón

El esquema de juego que utiliza Pellegrini en el Málaga es muy claro, con un 4-2-3-1 que sufre cuando no tiene la pelota. Para robarla, la presión de los tres mediapuntas (Cazorla, Baptista o Buonanotte y Joaquín) es fundamental para que Toulalan y Apoño -también suele jugar Maresca en ese puesto- se sientan más arropados. Además, la línea defensiva da un paso al frente y se sitúa casi en el centro del campo, con el fin de que sea el bloque al completo el que presione. Es aquí donde está otro de los puntos negros del conjunto malaguista. Si el rival, en este caso el Sevilla, supera la línea del centro del campo se encontrará con una zaga, en ocasiones, descubierta, sobre todo, por los laterales -así le ganó el Cádiz en la final del Carranza-, pues tanto Eliseu como Jesús Gámez suelen incorporarse al ataque con mucha frecuencia y dejan mucho espacio.

con balón

El once de Pellegrini se siente muy a gusto con el esférico, pues si algo caracteriza a los equipos del preparador de los malagueños es el gusto por el fútbol combinativo. El mejor ejemplo de esto es el partido que el Málaga venció en Holanda al Feyenoord (0-2) en esta pretemporada, con Cazorla y Maresca al mando de la creación del fútbol. Aun así, el juego del cuadro blanquiazul suele comenzar en las botas de Toulalan. A partir de ahí se producen los continuos movimientos de Baptista y el ex jugador del Villarreal, sin olvidar a gente como Buonanotte y Duda, que también pueden ser titulares, ni las entradas por las bandas de Joaquín y Eliseu. Como hombre más adelantado está Van Nistelrooy, que sigue demostrando con goles que aún puede competir al máximo nivel.

lo mejor

La pegada. Tanto Van Gol como Baptista, sin obviar a Seba Fernández, Rondón, Duda y Buonanotte, asegurarán un elevado número de goles al final de la temporada. Jugadores de este nivel decantarán la balanza a favor del Málaga en muchos partidos que se presenten igualados.

lo peor

El portero Willy Caballero. Su presencia en un once titular con muchas estrellas chirría, pues no tiene el suficiente nivel que requiere un equipo que aspira a estar arriba toda la temporada.