Ante la importancia de un encuentro como la vuelta de la semifinal de Copa de mañana, cualquier mínimo detalle puede ser clave. Cuando hay tantísimo en juego y la tensión se hace patente, todo se puede decantar de un lado o de otro por una décima de segundo, y esta diferencia depende muchísimo de la frescura. En este sentido, el Sevilla parte con cierta ventaja con respecto al Atlético. Si en la ida fue el equipo de Unai Emery el que tuvo un día menos de descanso con respecto al partido previo de Liga, al jugar con el Granada el lunes y disputarse el partido el jueves, las tornas han cambiado esta vez.

A ello se suma que el Atlético viajó a Moscú la semana pasada para jugar la Liga Europa con el Rubin Kazan, si bien en ese partido sólo actuaron como presuntos titulares mañana Cata Díaz, Miranda, Mario Suárez y Falcao, quien tras su lesión necesita justamente acumular minutos. Sin embargo, el técnico argentino compitió de verdad ante el Espanyol, incluso tuvo que soportar el 1-0 tras la expulsión de Gabi durante toda la segunda mitad. De hecho, sólo reservó a Cata Díaz, sustituto de Godín, y a Mario Suárez, que participó 25 minutos al salir por Koke. Courtois, Juanfran, Miranda, Filipe Luis, Arda, Gabi y Falcao jugaron el partido completo, mientras que Diego Costa fue relevado en el minuto 86 por Raúl García.

En cambio, el Sevilla jugó en Barcelona con menos futbolistas llamados a ser titulares mañana. Reyes no jugó ni un minuto, mientras que Alberto Moreno sólo jugó 11, Negredo participó la última media hora y Medel y Kondogbia se repartieron el trabajo en la medular, jugando 55 minutos el chileno y 38 el francés. Emery repartió mejor sus fuerzas, aunque eso no quiere decir nada a priori.