Después de la vuelta de vacaciones, Miguel Torrecilla, director deportivo del Betis, tiene por delante dos temas fundamentales, las renovaciones de Rubén Castro y de Álex Alegría. El acuerdo con el delantero canario, como confirmó días atrás él mismo, está muy cerca, todo a expensas de la firma final para ampliar su vinculación al conjunto bético hasta 2019, y en el caso del atacante de Plasencia la idea en el club de Heliópolis sigue siendo la de renovarlo y extenderle su contrato -acaba el próximo 30 de junio- tres o cuatro temporadas.

Las últimas actuaciones de Álex Alegría hacen que el delantero tome fuerza en las negociaciones a la hora de renovar, algo que el conjunto verdiblanco siempre ha tenido claro después de que el jugador extremeño regresara de su cesión en el Numancia (12 goles en 41 partidos de Liga). Así lo expresó Miguel Torrecilla en sus últimas comparecencias públicas y salvo sorpresa, Alegría seguirá su carrera como jugador del Betis, como demostró el último día del mercado decidiendo no salir pese a una interesante oferta que la entidad heliopolitana había recibido.

Ante el Málaga, el 19 del cuadro verdiblanco demostró su poderío a la hora de controlar de espaldas, de desahogar el juego de su equipo cayendo a banda, y de desquiciar a los centrales del Málaga, sobre todo a Diego Llorente. Por eso, en el tramo final del encuentro, la afición verdiblanca coreó su nombre, reconociendo el buen trabajo de un futbolista que pasaría a tener un salario que se ajustaría al de un jugador de Primera División y con una cláusula que también sería elevada, pues en el Betis no quieren que vuelva a pasar con los canteranos lo de años anteriores.