"La imagen es clara, el gol entra". Así de contundente se mostró Gregorio Manzano después del partido. Evidentemente, se refiere al balón que sacó Albiol a disparo de Luis Fabiano, al filo del descanso. Esta circunstancia condicionó el partido, según su punto de vista. Eso y tener que cambiar a Sergio Sánchez y Romaric, lo que le impidió hacer variaciones tácticas, fueron claves.

"Tendríamos que hablar de muchas cosas y no nos pondríamos de acuerdo. Hemos hecho un gran esfuerzo y no merecemos la derrota, pero  la  injusticia es que el gol es gol, no hay tutía. Es una jugada muy difícil, complicada para el línea, pero aquí contra el Almería fue gol. Fue un momento clave, por el minuto y porque habría otro resultado para la vuelta", dijo Manzano. "No creo que  Fermín, el auxiliar, y así lo espero, esté condicionado por la presión mediática", añadió, antes de abundar en su protesta: "Esta jugada tendrá toda la carga mediática que tenga, pero si hubiese sido al revés no lo sé. Las imágenes demuestran que el balón entra, es gol y no hay más que contar".

Luego pasó a las cuestiones tácticas: "Ha sido un partido de poder a poder, hemos tenido que cambiar a dos jugadores por el tobillo y podríamos haber hecho otros planteamientos. Queda otro asalto y tenemos que ir con la esperanza de que por qué no va a suceder lo que ha sucedido aquí".

Se le preguntó si ve imposible remontar: "En el fútbol no hay nada imposible. Hay que marcar, con el 1-1 también habría que marcar, y por tanto  hay que ir al  Bernabéu a marcar. No está perdida ni sentenciada, sino bastante inclinada para ellos, pero hay que jugar".

Capítulo aparte tuvo para la afición: "He olvidado darle una matrícula de honor a nuestra afición. Ha sido espectacular el aliento antes, durante y después. Y ahora hay que corresponder a ese esfuerzo en Madrid". ¿Y el botellazo a Casillas? "El partido ha tenido una hermosura tan grande que  tendríamos que quedarnos con lo que es fútbol. Se ha vivido una noche muy buena de la afición apoyando y de dos equipos luchando. Tendríamos que olvidarnos de esta anécdota desagradable".