Aun a riesgo de quemarnos las pestañas en cada página de esta flamante edición de bolsillo en dos volúmenes, tal es el trabajo de reducción tipográfica llevado a cabo para conseguir un más que aceptable precio (35 euros) en comparación con el de la edición existente en pasta dura (150 euros), 50 años de cine norteamericano, de Bertrand Tavernier y Jean-Pierre Coursodon, mantiene intacto su valor como libro de referencia y consulta obligada sobre la historia del cine norteamericano, un riguroso estudio de carácter enciclopédico que no esconde, empero, su carácter crítico y personal, discutible en cualquier caso, y que recorre los principales acontecimientos, etapas, nombres (directores, también guionistas) y títulos producidos en Hollywood y alrededores desde 1939, en el esplendor de su periodo clásico, hasta comienzos de la década de los 90 del pasado siglo, en plena posmodernidad.

Como bien apuntaba Santiago Gallego, esta obra nos sitúa ante una interesante cuestionamiento de certezas, inercias, rancias cinefilias (contaminadas por la nostalgia y la amnesia) y criterios críticos simplificadores de otros volúmenes con aspiraciones parecidas, no sólo desde el minucioso trabajo de auténtica re-visión filmográfica (no hay más que leer las entradas para constatar que no se escribe de oídas) o re-descubrimiento que llevan a cabo sus autores, sino también a partir de una agradecida, ecléctica y desprejuiciada mirada a cineastas otrora considerados menores, injustamente sepultados por los grandes maestros incontestables auspiciados por la exitosa política de los autores, de Ford a Welles, de Hawks a Lang, de Lubitsch a Hitchcock, de Penn a Coppola o Scorsese.

El origen de esta versión, completada en 1995, publicada por primera vez en España en 1997, revisada, corregida (falta hacía) y ampliada en 2006, se remonta a 1961, fecha de publicación de 20 ans de cinéma américain, un volumen que se vería aumentado a 30 ans de cinéma américain en su edición de 1970. Constatamos así cómo Tavernier (1941), sólido pilar del cine francés industrial del último tercio del siglo XX (El relojero de Saint-Paul, El juez y el asesino, Coup de Torchon, Round midnight, La vida y nada más, La carnaza, Hoy comienza todo) y lo que llevamos del XXI (Salvoconducto, Holy Lola, La princesa de Montpensier), ha prolongado a lo largo de este tiempo su faceta como estudioso, crítico e historiador (conocida es su revancha, desde las páginas de Positif, contra los jóvenes turcos de Cahiers, revista de la que también fue colaborador, en su defensa de guionistas vilipendiados como Aurenche y Bost, a los que contrató para algunas de sus películas) en paralelo a su carrera como cineasta, labor que ha cristalizado en el apoyo constante a la recuperación del legado cinematográfico (en documentales o trabajos de investigación) o, como en este caso, pagando un enciclopédico tributo personal a ese cine norteamericano que fraguó su vocación profesional allá por los 60.

Un Diccionario general de directores (cerca de 300) y un Diccionario de guionistas (80) ocupan el grueso central de esta obra, complementada con utilísimos recorridos históricos desde 1939 a 1993, premios Oscar incluidos, un análisis de la política artística e industrial de los grandes estudios de Hollywood, un ensayo sobre la evolución de la censura y un informe sobre el estado del cine norteamericano a finales del siglo XX. El texto se completa con un anexo sobre el cine documental (o cine directo), una amplia bibliografía actualizada y un indispensable índice de doble entrada de las películas citadas y analizadas, con los títulos en su versión original y española.

Bertrand Tavernier y J.P. Coursodon Akal / Básica de bolsillo. 2 volúmenes. 1.408 páginas. 35 euros