El joven de 17 años que resultó herido por una bala perdida en el Polígono Sur el pasado domingo murió ayer en el Hospital Virgen del Rocío. El adolescente falleció a las dos y media de la tarde, casi 50 horas después del tiroteo en el que resultó herido de extrema gravedad. Los hechos ocurrieron sobre la una de la tarde del domingo en la calle Sebastián Bandarán, junto a un campo de fútbol en el que se enfrentaban dos clanes del barrio. El joven viajaba en el asiento trasero de un todoterreno que conducía su padre -que llegó a aminorar la marcha alertado por la riña- cuando uno de los participantes en la trifulca abrió fuego. Ninguno de los rivales sufrió heridas, pero la bala impactó en la cabeza del menor que iba en el coche.

Durante estos días se han concentrado decenas de familiares de la víctima en las puertas del hospital, donde la situación estuvo ayer tranquila a lo largo de todo el día. El Grupo de Homicidios de la Policía Nacional está buscando al autor del disparo, que pertenece a un clan procedente del desaparecido asentamiento chabolista de Los Bermejales. La familia del presunto autor de este homicidio fue desalojada de aquel poblado después de que el Ayuntamiento de Sevilla le ofreciera 42.000 euros a cambio de dejar su chabola en julio de 2004. Desde entonces el clan reside en las Tres Mil Viviendas, al igual que más de una veintena de familias del asentamiento, pese a las continuas promesas políticas de expulsar a los chabolistas de este barrio.