En el primer entrenamiento de la semana para preparar el duelo del domingo ante el Real Madrid, Juan Merino y su cuerpo técnico, con Capi y Alexis, abrieron las puertas a los aficionados y los casi 300 que acudieron a la ciudad deportiva mostraron su apoyo al linense. Si ya durante los ejercicios se escucharon aplausos, la gran ovación llegó en la retirada al vestuario, lo que incluso provocó los saludos de Merino hacia la grada.

"A por ellos" o "Ésta es la actitud", fueron algunas de las frases con las que los aficionados mostraron su apoyo al linense en su labor de entrenador interino. Los béticos están valorando el compromiso mostrado por el linense, que se mostró muy activo durante todos los ejercicios en los que llevó la voz cantante. Merino insistió mucho en que sus jugadores realicen una presión rápida sobre el balón y así lo fue pidiendo durante el partidillo, consciente de lo que le espera a su equipo el domingo ante el Real Madrid de Zidane.

Y es que, salvo giro inesperado, el linense se sentará en el banquillo por segunda semana consecutiva en la Liga, a la espera de que el club tome una decisión definitiva sobre el futuro entrenador. Si algunas voces ya se vienen pronunciando a favor de la continuidad de Merino, en el club todavía se mantienen abiertas las vías de comunicación con Juande Ramos, el preferido para el consejo pese al alto coste económico que supondría su llegada en este momento.

A la espera de que el de Pedro Muñoz se pronuncie definitivamente, el director deportivo, Eduardo Maciá, estudia otras alternativas, aunque nadie quiere precipitarse ante la toma de una decisión trascendental para el presente del equipo bético. Múltiples ofrecimientos han llegado a Heliópolis, donde tanto Maciá como algunos consejeros han mantenido conversaciones con entrenadores de distinto perfil, aunque el preferido continúe siendo Juande Ramos y la opción en la recámara sería Lorenzo Serra Ferrer.

Merino, mientras tanto, sigue a lo suyo. El club le encomendó una misión y él pretende cumplirla hasta que le digan lo contrario. Eso sí, con el apoyo de los aficionados, como ayer se lo demostraron, todo será mucho más sencillo.