A destajo y cumpliendo con lo previsto en su agenda, el director deportivo, Miguel Torrecilla, continúa perfilando el Betis de la próxima temporada, que hoy espera anunciar oficialmente las contrataciones de Aissa Mandi y Felipe Gutiérrez. Tanto el defensa como el centrocampista pasaron ayer la revisión médica en el Hospital Nisa y el club sólo está a la espera de cumplimentar toda la documentación, más enrevesada en el caso del chileno, para que se conviertan en la quinta y sexta incorporación de este verano.

El primero en llegar a Sevilla fue Felipe Gutiérrez, que lo hizo acompañado por el propio Torrecilla desde Barcelona pasadas las dos de la madrugada. A primera hora de la mañana, el centrocampista completó el examen médico que ya había iniciado el día anterior y su contratación quedó pendiente de algunos flecos.

El chileno es un centrocampista que puede actuar tanto de pivote como de interior, quizá la posición en la que mejor desarrolla sus cualidades. Con una buena visión de juego, Felipe, que no está exento de capacidad de recuperación, posee un buen manejo del balón, lo que permite incorporarse al ataque para buscar la portería o asistir a sus compañeros.

El club verdiblanco, que pagará 2,5 millones de euros por su pase, confía en que hoy quede cerrada toda la documentación relativa a su contratación -sus derechos no sólo pertenecían al Twente, sino también a un grupo inversor que le prestó dinero en su momento- para presentarlo mañana junto a Mandi.

El central es considerado por los técnicos como una oportunidad de mercado, ya que su polivalencia le permite ocupar cualquier puesto de la zaga, aunque, en principio, el Betis lo ficha como central, el puesto en el que habitualmente jugó la pasada temporada. Mandi, que cumplirá 25 años el próximo mes de octubre, sí cuenta con una amplia experiencia en el fútbol francés, después de haber disputado más de 125 partidos en la máxima categoría con el Reims, club en el que ejerció como capitán. Ese carácter de líder es precisamente otra de las cualidades valoradas por los técnicos para decidir su incorporación.

Mandi llegó casi a las once de la mañana procedente de Lisboa y se marchó directamente a Nisa junto a Torrecilla y donde luego posó junto a Felipe Gutiérrez. Durante toda la tarde, el club verdiblanco estuvo finiquitando su contrato, ya que la intención era anunciar ayer su incorporación, aunque finalmente todo quedó a la espera de que el Reims diese la luz verde definitiva al traspaso.

Con estos dos fichajes, Torrecilla ya tiene a cinco de las diez incorporaciones que anunció en su momento y ahora la idea sería la llegada de un delantero antes de que comenzase la pretemporada. De esta forma, los técnicos trabajan con los dos perfiles que apuntó Torrecilla, a la espera de que alguno se ponga a tiro.

Así, si el club verdiblanco tiene decidido que la principal apuesta económica se realizará en uno de los dos puntas que vendrán a lo largo del verano -el argentino Jonathan Calleri es uno de los que más gusta-, los técnicos trabajan tanto en esta posibilidad como en la de una cesión con opción de compra, una operación que ya se intentó con Willian José -su nombre no está olvidado, a la espera de nuevas conversaciones con el fondo de inversión propietario de sus derechos- y en la que también entraría la alternativa de Tony Sanabria, el delantero paraguayo de la Roma por quien el Betis ha sondeado su situación.

La maquinaria verdiblanca ya se ha puesto a funcionar para ultimar la columna vertebral que Torrecilla quiere poner cuanto antes a disposición de Gustavo Poyet. Si Aissa Mandi debe convertirse en el líder de la defensa, y tanto Felipe Gutiérrez como Jonas Martin formarán parte del armazón del centro del campo, el otro punto fuerte de la planificación estará en la delantera. El director deportivo ha venido manejando una amplia lista de posibilidades, aunque siempre atento a las opciones que el mercado pone a tiro.