No se ha quedado parado el Cajasol ante el mazazo del alero ansiado, provocado a medias por el Real Madrid, por la adquisición de Sergi Vidal, y el Baskonia, por la retención de Fernando San Emeterio. Cuando a comienzos de esta semana comunicaron desde Vitoria que el cántabro no saldría del Buesa Arena -aunque alguno hay que aún dice que Querejeta, el presidente del Caja Laboral, está pidiendo dinero todavía por su salida-, la maquinaria cajista varió la estrategia.

En el club sevillano no van a pagar por la marcha de San Emeterio, por mucho que ya hubiera un acuerdo con el jugador para que formara parte de la plantilla de Joan Plaza la próxima temporada, y ahora sus negociaciones van por otro camino. En el Cajasol echan cuentas para firmar a un alero alto estadounidense, cambiando la idea del escolta yanqui y, por tanto, descartando al candidato número uno en las últimas semanas, el especialista desde el triple Chris Lofton -quien, por cierto, no vendrá a Sevilla y tampoco a Estudiantes; supuestamente debe tener una mejor propuesta que la que le ofrecen los colegiales-. Con Asselin en cartera, pues el acuerdo con el ala-pívot dominicano está cerrado y sólo faltan mínimos detalles para pagarle mucho menos de su cláusula de rescisión al Manresa, la planificación se culminará con el interior con pasaporte del país caribeño, el alero alto yanqui y ahora el escolta debe ser europeo o español.

Con Rodrigo de la Fuente sonando aún como candidato al puesto, la petición expresa de Plaza de contar con un dos prioritariamente ofensivo, puede que se haya reactivado la operación con Serkan Erdogan.

El turco ya había desvelado a este periódico el interés mostrado verbalmente en su día por el Cajasol, aunque nunca recibió una oferta en firme de los hispalenses. Ahora, toda vez que habrá una variación en las nacionalidades del escolta y del alero, las posibilidades de que sea el otomano, un excelso anotador, quien recale en San Pablo vuelven a tomar forma.