Tiempo de cambios. El Sevilla Atlético sumó un interesante empate en El Sadar, en casa de uno de los principales candidatos al ascenso como es un Osasuna que ahora lidera el otrora maestro de esta manada de cachorros franjirrojos: Diego Martínez.

El del banquillo es uno de los muchos cambios que ha sufrido el filial sevillista durante el verano. El equipo que ahora entrena Luis Tevenet ha visto cómo gran parte de su columna vertebral volaba durante el verano y comprobar cómo respondía tanto a los nuevos mecanismos que quiere implantar el técnico sevillano como a la ausencia muchas de sus figuras era una de las grandes incógnitas que se planteaban al inicio de temporada. Y Tevenet debe estar satisfecho con la respuesta.

La nueva pareja de centrales -Konyk y Álex Muñoz- demostró estar a un buen nivel en su primer test serio. La ausencia de Borja Lasso, y todos esos automatismos que se creaban a su alrededor, debe irse superando con el paso de los partidos, ya sea con otro que asuma su rol -Aburjania o Aitor Cantalapiedra, que ayer comenzaron el encuentro desde el banquillo- o con un sistema que no requiera de esa figura tan necesaria durante la estancia de Diego Martínez en el banquillo.

Esta última fue la opción por la que apostó Tevenet, que dibujó un 4-4-2 y dio entrada a Marc Gual y a Carlos Fernández en el once inicial. Un mecanismo con mucho potencial arriba que todavía debe engrasarse y que regalará muchos puntos a la parroquia sevillista.

Comenzó el partido con susto para los visitantes. A los seis minutos de partido, De las Cuevas adelantaba a los rojillos en fuera de juego, tal y como señaló el colegiado. Más allá de esta ocasión en el inicio del choque, poco destacable en la primera mitad, si bien Carlos Fernández, con un disparo lejano en el ecuador del primer acto, intentó sorprender a Sergio Herrera, aunque su chut se marchó fuera.

La segunda mitad sí tuvo algo más de chicha. El Sevilla Atlético, con un Osasuna dominador de la pelota, trató de sorprender a la contra. Así llegó la primera ocasión de este segundo acto, con una rápida combinación entre Carlos Fernández y Matos, cuyo centro no llegó a golpear bien Marc Gual.

Pese a ello, se adelantó el cuadro rojillo. Tras una pared con Clerc, Quique llegó a la línea de fondo tras superar una mala salida de Caro y centró el balón al área chica, donde apareció David Rodríguez para empujarla con la cabeza en solitario.

La reacción llegó casi en la siguiente jugada. Una falta bien lanzada por Curro desde unos 25 metros se topó con Sergio Herrera, quien consiguió detener el rechace en los pies de Marc Gual, pero no el siguiente de Álex Muñoz, que materializó el empate.

Con un pulso bien llevado entre las partes, más allá de un disparo lejano de Fran Mérida, el susto llegó de nuevo al cuerpo del filial cuando a falta de pocos minutos para el final, Unai García remataba una falta y la pelota se colaba en la meta de Caro, aunque de nuevo, el jugador de Osasuna estaba en fuera de juego y el gol no subió al marcador.

Así las cosas, el Sevilla Atlético inicia una nueva temporada en la Segunda División con un empate en casa de uno de los candidatos al ascenso, Osasuna, demostrando que, pese a que le quedan todavía algunas cosas por pulir, el camino está trazado.