Empezó la temporada con ficha del filial y la termina con ficha del primer equipo pese a sólo haber jugado tres ratos, ochenta y ocho minutos concretamente, y haber marcado un gol, que valió un triunfo. A veces el fútbol esconde sus miserias y expone su grandeza, como la que ha tenido Carlos Fernández para superar su grave lesión de rodilla y la que ha tenido el Sevilla para premiar su tesón, y también atar su calidad, con un nuevo contrato hasta 2021.  El delantero sevillano, que el lunes próximo, 22 de mayo, cumplirá 21 años, firmó en la tarde de este miércoles su nuevo contrato por tres temporadas más. Le quedaba un año.

"La alegría que siento ahora mismo es difícil de explicar y transmitir -explicó el esbelto delantero en SFC Radio-. Ante todo quiero empezar agradeciendo a todo el club en general por el cariño y la confianza que ha depositado en mí hasta 2021. Agradecer desde el presidente hasta el último trabajador, porque este año para mí ha sido complicado tras la lesión. Ya por noviembre el club se puso en contacto con mi agente para iniciar la negociación. Me he sentido arropado y querido, y estoy muy contento por poder seguir ampliando mi sueño de ser sevillista y poder defender esta camiseta hasta 2021".

Sevillista de cuna, como se suele decir, Carlos Fernández fue definido como el tercer delantero del equipo antes de su grave lesión de rodilla en un entrenamiento en octubre. Siete meses después ha vuelto a entrenarse con el primer equipo y ha recibido la confianza del club al ampliar su contrato para ser el primer fichaje de la nueva temporada 17-18.

El chaval estaba eufórico, dentro del aplomo y la madurez con el que se expresa. "Es un día para enmarcar y guardar siempre en mi recuerdo como uno de los más importantes y bonitos. Recuerdo que el día del gol ante Las Palmas dije que era el día más feliz de mi vida y de mi carrera deportiva… El día de hoy lo pongo al lado".

Tiene su explicación, porque el futbolista lo ha puesto todo para seguir metiendo riñones con coraje en el Sevilla, su club: "El club del que mi padre me inculcó sus colores y su amor. Para mí es un orgullo poder seguir defendiendo esta camiseta, porque soy sevillista desde pequeño". Ahora le toca devolver la confianza. "Me siento capacitado para defender esta camiseta durante muchísimo tiempo, es un orgullo para mí", aseguró.