El novillero sevillano Rafael Serna ha recibido el alta médica y abandonó ayer el Hospital San Francisco de Asís de Madrid, donde ha permanecido ingresado durante nueve días, desde la noche del 12 de junio después de ser corneado de gravedad en la plaza de Las Ventas cuando entraba a matar al novillo que cerraba plaza tras haber realizado dos buenas faenas a sus dos enemigos.

El novillero se desplazará a su domicilio en Sevilla y tiene previsto iniciar una terapia intensiva de rehabilitación la semana que viene.

Rafael Serna dijo a su salida del hospital que su ilusión está puesta en reaparecer cuanto antes y que se irá marcando "pequeñas metas" en la rehabilitación e intentará cumplir con todos los compromisos que sus apoderados tienen firmados, según informó un portavoz del novillero.

El novillero reconoció que los médicos, "a los que estoy profundamente agradecido", serán quienes marquen los tiempos y tiene "claro" que cuando llegue el momento de reaparecer lo hará "a más del cien por cien".

Rafa Serna quería estar listo para torear en la feria de las Colombinas de Huelva a comienzos del mes de agosto, aunque todavía es imposible determinar cuándo estará listo para torear.

El mes de julio ya se da por amortizado según ha declarado su apoderado, José María Almodóvar.

Los facultativos aún no han aventurado ningún plazo definitivo de recuperación, la cual dependerá de la evolución del injerto que ha sufrido el novillero en la arteria dañada y del tratamiento con anticoagulantes que lleva aparejado.

El percance, que fue calificado como muy grave por los doctores, supuso la rotura de las venas safena y femoral además de la contusión de la arteria femoral y el nervio crural de la pierna derecha.

La trayectoria de la herida llegó a contornear el fémur y alcanzó la cara externa del muslo, y la ausencia de pulso en la arteria pedia obligó a intervenirle dos veces hasta que recuperó la normalidad circulatoria en el miembro herido.