Dice el tango que 20 años no es nada. Depende del ritmo. A punto de cumplirse dos décadas desde la aprobación de la Ley de Costas, en julio de 1988, aún queda por incorporar al dominio público el 17% de los 10.104 kilómetros de la costa española.

Pese a que la propia ley se daba un plazo de cinco años, la complejidad del acto administrativo del deslinde -que consiste en trazar el espacio público marítimo-terrestre, en el que no puede haber propiedad privada, y la zona de protección adyacente, de cien metros o un mínimo de 20 en áreas urbanas- ha retrasado durante más tiempo del deseado el propósito de tener protegida toda la costa española.

En Andalucía, el porcentaje se eleva al 24% de la costa sin deslinde, un paso imprescindible para acometer el derribo de las edificaciones que resulten ilegales o de impedir la construcción de otras nuevas. Desde la aprobación de la ley, el Gobierno ha recuperado un total de 1.597,6 kilómetros de los 2.101,6 de la costa andaluza y el resto se encuentra en fase de realización.

Por provincias, las mayores dificultades se presentan en Málaga, donde se ha deslindado un 62,3% de sus 168 kilómetros, por lo que restan unos 64. Más avanzada se encuentra la costa de Granada, con el 98,5% del litoral ya de dominio público de sus 80,12 kilómetros.

En cuanto a Huelva, provincia con mayor extensión al alcanzar 514,5 kilómetros, el deslinde se ha efectuado en un 68,6%. En Cádiz se ha deslindado el 81,65% de sus 493 kilómetros y , en Almería, donde mayor expectación han creado los deslindes como consecuencia de la polémica del hotel de la playa de El Algarrobico, de sus 245,4 kilómetros de costa se han incorporado al dominio público el 82,6%.

Incluso Sevilla tiene costa, ya que el Ministerio contabiliza la ría del Guadalquivir. Una explicación oficial: "Hasta donde llega la marea más alta es costa". De los prácticamente 600 kilómetros, se ha ejecutado el deslinde en el 74,3% del territorio, quedando 154,2 kilómetros.

El problema consiste en que durante los diez primeros años tras la aprobación de la Ley de Costas el ritmo fue extremadamente lento, con una media de deslindes en toda España inferior a los 200 kilómetros anuales.

En algunas provincias, como Valencia, Baleares y La Coruña no se empezaron los trabajos hasta 1993. En Málaga no lo hicieron hasta 1996. Pero el caso más tardío es el de Almería, que hizo su primer deslinde en 1998, una década después de la aprobación de la ley, según datos del Ministerio de Medio Ambiente.

El ritmo se acelera a partir de 1999. Ese año se alcanzan 810,5 kilómetros deslindados en España. A partir de entonces, los ritmos medios rondan los 500 kilómetros anuales, con independencia del color político del Gobierno de turno.

En 2004, con la llegada al Ministerio de Medio Ambiente de Cristina Narbona, se aprobó el Plan de Deslindes que con una cuantiosa inversión tenía como propósito devolver a la titularidad pública toda la costa antes de 2008. Desde finales de 2006, unos 56 kilómetros de costa andaluza se han incorporado al dominio público.

Un paso lento en la ejecución, un baile pausado, donde el Gobierno tiene en cuenta que, dados los pasos legales y las actuaciones a realizar, la aprobación de determinadas zonas de deslindes pueden tardar años en ser ratificadas, teniendo en cuenta el periodo de alegaciones y sentencias judiciales que pueden producirse durante el proceso.