La Junta de Andalucía reculó ayer en su decisión de integrar al Patronato de la Alhambra y el Generalife en la futura Agencia Andaluza de las Instituciones Culturales. Seis días después de comunicar sus intenciones de disolver el organismo autónomo e integrar el Patronato del monumento en esa nueva institución, la Consejería de Cultura anunció ayer que da marcha atrás y mantendrá la autonomía en la gestión del conjunto nazarí "al constatar que en la actualidad no se dan las condiciones de consenso institucional y social necesario". Aunque, eso sí, anunció su intención de abrir un "debate" en el seno del Patronato como en la "propia sociedad granadina" para dilucidar "el mejor estatus jurídico para el monumento".

Básicamente, esta última afirmación vendría a refrendar la decisión tomada y aprobada hace sólo dos meses para transformar el Patronato en una Agencia de Régimen Especial. Aunque este proyecto también encontró cierta oposición entre el personal laboral de la Alhambra, la aplicación de la nueva Ley de Administración de la Junta (LAJA) obligaría a modificar la fórmula jurídica de la Alhambra -prevé la extinción de los organismos autónomos- y abriría la puerta a recuperar la idea de la agencia de régimen especial o bien a estudiar la creación de una agencia única similar a la aprobada para la unificación de las entidades culturales .

Según explicó la Junta en un comunicado, el objetivo de integración en la agencia cultural era dotar al nuevo ente de una "mayor autonomía y de instrumentos de gestión más ágiles y eficientes", asegurando que se facilitaba el acceso a "nuevas fuentes de financiación pública privadas, a servicios de transferencia tecnológica y programas de cooperación".

Sin embargo, "ante el vivo debate suscitado en torno a su futuro", Cultura adoptó ayer decisión de mantener el Patronato como organismo autónomo. Mientras tanto, defendía la necesidad de crear la agencia andaluza para "reordenar el sector público cultural de la comunidad autónoma", así como para "gestionar los archivos, las bibliotecas, los centros de documentación, los museos, los espacios culturales, los teatros, los centros de depósito, los gabinetes pedagógicos y todas las demás instalaciones culturales dependientes de la Consejería de Cultura". Con la salvedad de la Alhambra y Generalife.