La ministra de Defensa, Carme Chacón, ha comunicado al Partido de los Socialistas Catalanes (PSC) su voluntad de concurrir a unas elecciones primarias en su partido en el caso de que Rodríguez Zapatero renuncie a la carrera de la reelección, y uno de los argumentos que ha utilizado es que contaría con el apoyo de Andalucía. La noticia, avanzada ayer por La Vanguardia, causó cierta sorpresa en el PSOE andaluz, toda vez que la dirección regional no se ha pronunciado sobre la sucesión, y que el vicepresidente y ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, es quien cuenta con mayores simpatías en la comunidad. Rubalcaba es diputado por la provincia de Cádiz, y mantiene excelentes relaciones con algunos destacados socialistas andaluces. Chacón parece decidida a lanzarse a las primarias. Ayer suspendió su presencia en un mitin al que iba a asistir en Málaga. Algunas fuentes relacionaron el hecho con el comité federal del PSOE del sábado.

La dirección andaluza del PSOE no se ha definido sobre este asunto, debido a que Rodríguez Zapatero aún no ha anunciado qué hará. No obstante, la opinión de esta dirección es que, con independencia de cuál sea la postura final, si la hay, es que cada uno de los militantes ejercería su voto libremente, ya que es individual y secreto. La operación Rubalcaba, que contaba con el apoyo, entre otros, de los andaluces en la dirección federal, así como del vicesecretario general, José Blanco, pasaba por que fuera el comité federal quien nombrase el candidato directamente. Ahora bien, fuentes del PSOE andaluz también dan por hecho que si Chacón da el paso, "le saldrán tres o cuatro" contrincantes.