No es que no quieran. Es que no pueden. Más de la mitad de los alcaldes españoles no podrá seguir la recomendación de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) de bajarse el sueldo porque no lo perciben.

Según datos de la FEMP, en España hay 8.115 ayuntamientos y, de ellos, 4.883 cuentan con menos de mil habitantes. Salvo excepciones, los alcaldes de estas localidades realizan su labor por amor al arte y no cobran un salario mensual. Más que nada porque las exiguas arcas municipales no lo permiten. Esto quiere decir que las decisiones sobre alumbrado, pavimentación o saneamiento del 60 por ciento de los municipios (el 3,5 por ciento de la población española) las toman personas que no perciben ni un euro por ello y que sólo -y no en todos los casos- cobran los gastos que originan estas gestiones.

Quizá por esa ausencia de salario, el Código de Buen Gobierno Local aprobado por la FEMP expresa la intención de promover la creación de un fondo en las autonomías "a los efectos de garantizar las retribuciones de los electos locales en ayuntamientos de menos de 5.000 habitantes". Para "solidarizarse" con los funcionarios, la FEMP decidió en su última Ejecutiva que los alcaldes se rebajaran este año el sueldo en función de la retribución que perciben y en sintonía con el decreto del Gobierno que sitúa esa reducción entre el 15 y el 0,25 por ciento. Ningún organismo oficial dispone de datos de los salarios de todos los alcaldes de España, que, según la Ley de Bases de Régimen Local, deben ser fijados por los respectivos plenos municipales.

Fuentes de la FEMP han subrayado que, en general, los criterios que se han aplicado en los últimos años para acordar el sueldo de los regidores han sido "a la baja" y, de hecho, tienen congeladas sus retribuciones desde 2009 -algunos desde un año antes- por consejo de la propia Federación. Aun así, algunos alcaldes ganan más que el propio presidente del Gobierno.

Este es el caso del regidor de Barcelona, el socialista Jordi Hereu, cuyo sueldo, según la pagina web del Ayuntamiento, ascendía en 2009 a 125.194 euros brutos anuales, mientras que el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, cobra actualmente 91.982 euros, la misma cantidad que un año antes. También el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón (PP), tiene una retribución notablemente superior a la de Zapatero y su sueldo anual es de 119.985 euros, aunque lo tiene congelado desde 2008. El del regidor de Bilbao, Iñaki Azcuna (PNV), también lo supera (104.782 euros). Algunos, como el de Córdoba, Andrés Ocaña (IU), es bastante inferior: 78.496 euros.

Pese a que el Código de Buen Gobierno Local establece que las remuneraciones de los cargos electos "serán publicadas para conocimiento de la ciudadanía", no resulta fácil encontrar en las páginas web oficiales de los municipios esos datos y, en muchos casos, no están actualizados. Dicho Código ofrece a las corporaciones unas pautas a la hora de fijar las retribuciones de sus máximos responsables y, así, recomienda que los sueldos respondan a criterios objetivos como la población, el presupuesto o la situación financiera municipal. Asimismo, pide que se fijen partiendo del régimen retributivo de cargos públicos de otras administraciones o funcionarios que desempeñen funciones de similar responsabilidad. Una recomendación que ya tenía en cuenta el Ayuntamiento de Madrid, que equipara el sueldo de su alcalde al de un secretario de Estado.

La FEMP recomienda también que sean las federaciones territoriales de municipios las que marquen los criterios. Y eso es lo que ha hecho la valenciana, que aconseja que se retribuya a los alcaldes con dedicación exclusiva de su comunidad con salarios equivalentes a un jefe de sección, a un jefe de servicio, a un director general, a un subsecretario, a un conseller o al presidente de la Generalitat, en función del tamaño y presupuesto de la corporación. De este modo, en 2008 se recomendaba para un alcalde de un ayuntamiento valenciano con once concejales un sueldo de 37.641 euros, frente a los 79.548 que debían cobrar los regidores de las tres capitales de provincia.

EUDEL, la federación vasca de municipios, también ha redactado sus propias sugerencias y equipara los salarios a los de los funcionarios de más alto nivel y, para las ciudades de más de 100.000 habitantes, a los de un viceconsejero, si bien deja al margen del acuerdo a las tres capitales. En cualquier caso, este será el último mes que los alcaldes disfrutarán de su actual nómina. La tijera ya está preparada para junio.