La ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, reunió ayer en el Monasterio de la Cartuja a los resposables autonómicos del ramo en la XII Conferencia Sectorial, a cuya inauguración asistió el presidente andaluz, José Antonio Griñán. Una ocasión idónea para conocer el nivel de compromiso del Gobierno central con los proyectos locales, en especial con la ampliación del Bellas Artes. Sin embargo, poco o casi nada se quiso mojar la titular de Cultura sobre este tema: "Este proyecto sigue su curso y para primeros de 2010, en enero, convocaremos el concurso arquitectónico", declaró sin precisar el presupuesto destinado a esta monumental obra ya que dependerá "del resultado del concurso", si bien resaltó que el de Sevilla es "uno de los museos más importantes del país" pese a confesar que no ha visitado aún la exposición Colección Casa de Alba, uno de los hitos culturales del año en España.

Por su parte, la consejera Rosa Torres insistió en las buenas relaciones que existen entre ambas administraciones y apuntó que la ampliación del museo ha sido tema de conversación desde sus primeras reuniones. Esta sintonía parece existir también en torno a asuntos como el Arqueológico, del que la ministra declaró que el proyecto para su reforma "está mucho más avanzado", aunque no disponía ayer de los datos presupuestarios; y sobre la preservación del patrimonio subacuático, asunto sobre el que girará una conferencia internacional en Cartagena en mayo de 2010.

Durante la reunión mantenida con los consejeros de Cultura de toda España, la ministra anunció la puesta en marcha del Plan de la Danza, una iniciativa que "recoge aspectos necesarios para dinamizar y aprovechar el capital con el que cuenta este país en torno a la danza, y que es prioritario para el Ministerio", declaró Sinde, que añadió que "la coyuntura económica hace necesario apoyar las nuevas formas de generar empleo, industria y economía más estables", razón por la que Sinde apostó por pasar de "un turismo de sol y playa" a un "turismo cultural".

En este sentido, el flamenco es un reclamo de primer orden. Precisamente ayer se celebró en la Cartuja un acto de apoyo convocado por la Junta para que la Unesco declare el flamenco Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, que contó el respaldo de numerosos artistas, los titulares de Cultura de Murcia y Extremadura y la propia ministra, que por la mañana recordó su ayuda a proyectos como la Ciudad del Flamenco de Jerez o la Bienal de Sevilla. Para Sinde, el Gobierno apoya la candidatura "igual que la de los castellers", pero, añadió la ministra, "el flamenco es un rasgo que nos identifica muy claramente" fuera de España.