Sevilla

La número dos del PSOE lo deja para competir por la secretaría de Sevilla

  • El onubense Mario Jiménez se perfila como su sucesor en la dirección regional · La salida de la consejera de Presidencia deja el campo abierto a Griñán para confeccionar su Ejecutiva 'polifónica'.

No se puede ser dos veces dos a la vez. Si Susana Díaz quiso ser alguna vez la segunda socialista en importancia en el Gobierno de José Antonio Griñán y, a la vez, número dos en el PSOE andaluz, alguien le debió recordar, en su día, que nunca nadie había tenido tanto poder. Bueno, sí: Alfonso Guerra, un admirado de Susana Díaz, que fue vicepresidente del Gobierno y vicesecretario general en tiempos de Felipe González. Susana Díaz, actual consejera de Presidencia de la Junta, anunció ayer que dejará de ser la secretaria de Organización del PSOE en el congreso regional del próximo fin de semana en Almería porque competirá el 14 de julio por la secretaría provincial de Sevilla, a la que también optará, posiblemente, una lista de críticos. Así, al menos, lo indicaron algunos de ellos ayer a este medio, habida cuenta de que obtuvieron un 35% en la elección para delegados de este congreso regional, donde José Antonio Griñán saldrá reelegido secretario general de la federación socialista más importante del país.

Hasta ahora, Susana Díaz no había desvelado cuál sería su hoja de ruta en el PSOE, aunque todo indicaba que, cuando Griñán le propuso ser consejera de Presidencia, conllevaba dejar de ser la número dos del partido. El presidente le aupó a uno de los puestos más importantes de su Ejecutivo, debido, entre otras razones, al papel de interlocutura que había ejercido en las negociaciones con IU para confeccionar el Gobierno. También hay quien mantiene en en el PSOE, sobre todo en el sector crítico, que la dirección regional puede ser más dialogante sin una persona que ha marcado su territorio sin más límites que los que le subrayaba el secretario general, José Antonio Griñán.

Hasta hace unos días se mantuvo la incertidumbre sobre si Díaz aspiraba a ser vicesecretaria general del PSOE, pero o ella se había convencido de que era bastante poder para una sola persona o siempre pensó en Sevilla, cuya provincia cuenta con el mayor número de afiliados de Andalucía. Díaz, no obstante, podrá seguir teniendo un puesto en la Ejecutiva regional del PSOE, pero no en una posición de tan alto poder. Susana Díaz salió elegida secretaria de Organización en el congreso extraordinario de 2010, pero fue la dimisión meses después del vicesecretario general, Rafael Velasco, lo que le convirtió en número dos de la sede de la calle San Vicente. Desde allí construyó su poder dentro del partido, se conjuntó con Griñán en su apoyo a Carme Chacón como secretaria general y le ayudó a arrinconar a los críticos, un hecho que consiguió en Almería y, en menor medida, en Cádiz y en Sevilla.

El anuncio de la salida de Susana Díaz a pocos días del congreso de Almería deja espacio a José Antonio Griñán para confeccionar una Ejecutiva a su medida, que pueda compenetrarse desde otro prisma con el Gobierno andaluz. El hombre mejor situado para sustituir a Susana Díaz es el onubense Mario Jiménez, actual portavoz parlamentario socialista. Como Díaz, Mario Jiménez también procede de Juventudes Socialistas y fue de las personas que ayudó a José Antonio Griñán a hacerse con el partido en Andalucía. Tal como publicó este medio, en Huelva ya buscan un sustituto a Mario Jiménez, que es secretario general de esta provincia.

A Griñán siempre le ha gustado la polifonía en política. Susana Díaz, en el Gobierno, y Mario Jiménez, en el partido, puede ser un buen esquema, aunque cabe resolver si el onubense será secretario de Organización o vicesecretario general. No es un asunto menor. Si es responsable de Organización, debería dejar la portavocía en el Parlamento andaluz; si es vicesecretario general, podría compatibilizarlo y convertirse en la voz del partido. Ahora bien, no hay que olvidar lo de las polifonías. De hecho, cuando Griñán anunció su nuevo Gobierno aseguró que quería una estructura en el PSOE donde la secretaría de Organización estuviera dividida en varias áreas, una de cuyas secciones sería para el granadino Francisco Álvarez de la Chica, ex consejero de Educación. El gaditano Juan Cornejo, organizador de este congreso, también asumirá uno de estos puestos, aunque Griñán deberá contar con alguna mujer más en uno de los puestos más visibles. Él ha dicho que desea una dirección paritaria.

El congreso del PSOE comenzará en Almería el viernes con la votación del informe de gestión del secretario general; a Griñán se le elige el sábado, y el domingo, a la nueva dirección. El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, clausurará este cónclave, al que también está previsto que asista el líder de los socialistas en el Parlamento Europeo.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios