Los vecinos de Los Palacios tendrán que esperar unos días para ver cómo su Ayuntamiento y el municipio vuelven a la normalidad tras el grave incendio que, el jueves, arrasó casi todo el archivo municipal, donde se custodiaban documentos históricos de valor incalculable para la memoria local y de la actividad reciente del Consistorio. El edificio no podrá abrir al menos hasta el martes. Desde ayer, la Secretaría y el Registro están en un edificio provisional para los trámites más urgentes en una población de casi 38.000 personas. Tras un zafarrancho de limpieza, se espera que el martes Urbanismo e Intervención estén operativos en su sede habitual. Aunque todavía hay que evaluar los daños estructurales, porque sobre el techo del archivo, en el que se llegaron a alcanzar los 300 grados de temperatura, se ha abierto una grieta y hay que hacer una cata.

Pero las respuestas que zanjen la incertidumbre que el suceso ha provocado puede que tarden más. La polémica se aviva por el momento en el que se ha producido el suceso, mientras la Fiscalía investiga la gestión del anterior gobierno del PSOE, que está reflejada en parte en esos papeles perdidos, y por las, para algunos, más incendiarias palabras del actual alcalde, Juan Manuel Valle IP-IU, vinculando los dos hechos. Fuentes de la Guardia Civil insisten en que, por la gravedad y el grado de destrucción, no es fácil saber si el fuego fue intencionado o no. Si las llamas se ciñeran a una zona ya habría conclusión. No hay testigos además. Lo de que ha sido provocado -por la falsa alerta en una pedanía y el fuego de contenedores que coincidieron, el ruido del cristal roto seguido de las llamas que describió la limpiadora que dio la voz de alarma- es una conjetura, dicen.

Ayer, después del fuego que se mantuvo vivo durante muchas horas entre los legajos, cinco agentes del Grupo de Investigación de Incendios de la Guardia Civil, con el apoyo de la Policía Judicial de Utrera, siguieron con la inspección ocular y la recogida de muestras hasta las siete y media de la tarde. Las pruebas se enviarán a Madrid para su análisis. Las certezas sobre el origen del fuego tardarán unos días y traerán más controversia. De confirmarse que ha sido provocado sería un delito y habrá que aclarar la autoría. Si fue fortuito, las "conclusiones" que Valle invitó a sacar tampoco saldrán gratis, aunque ayer recordó que no acusó a nadie directamente y que llevan dos años de continuos actos vandálicos -saboteo de bombas de fuentes públicas, daño al arbolado, incendios de contenedores...- de lo que deducen una intención de perjudicar al gobierno. "El primer bombero en llegar al incendio me ha confirmado que había una hoja de cristal rota y las otras intactas", decía el regidor.

El PSOE del ex alcalde Antonio Maestre, imputado por supuestos delitos de tráfico de influencias, prevaricación y malversación en la gestión del Ayuntamiento y en la de la sociedad, ha anunciado querellas. También hay quien dentro del PSOE de Sevilla ve conveniente que la secretaria y presidenta in pectore de la Junta, Susana Díaz, marque distancias con el que es número 3 de su Ejecutiva, por el camino de denuncias, declaraciones judiciales y titulares que le esperan y cuando la imagen de su Ayuntamiento ardiendo le ha llevado a primera plana nacional.

Y todo en un Consistorio que debe cuatro nóminas y cuya deuda -cuando en unos meses reciba la de la Mancomunidad, que también presidió Maestre, y la de la sociedad de desarrollo- se acerca a los cien millones. Ahora hay que reparar daños: todas las plantas del Ayuntamiento están afectadas por el humo, el sistema eléctrico y el informático. Un frente más para un gobiernode siete ediles, la mayoría absoluta está en once, en un mes clave para tomar decisiones.

Desde el PP y el PA, en la oposición, se apeló ayer a la prudencia sobre el incendio -no hay razones objetivas para señalar a nadie, aún cuando fuera intencionado, coincidían- y se incidió en la sensación de pesadumbre y abatimiento que el fuego ha provocado entre los palaciegos. Andalucistas y populares insistían en que la mayor pérdida, el motivo de "pésame", es la Historia, la memoria irrecuperable de los documentos antiguos quemados. Lo que se podía sacar medio entero del archivo era trasladado ayer a una nave habilitada en el Polígono El Muro, para extenderlo e intentar salvarlo. En los trabajos están participando siete u ocho voluntarios, junto al archivero. El jueves estuvieron hasta la madrugada, ayer iban por el mismo camino. Pero gran parte se está llevando directamente al vertedero.

El PA y el PP están convencidos de que el fuego no frenará los procesos judiciales en marcha. Está el estudio financiero que se hizo al inicio del mandato. La imputación de la Fiscalía revela que maneja ya documentación que le ha facilitado el gobierno local, papeles que tendrán copia informática o puede que estuvieran en el departamento correspondiente o en la Intervención. En el caso de la sociedad de desarrollo, a la que se refiere una de las denuncias, en su archivo correspondiente.

Así, instan al alcalde a rebajar la tensión y a que este hecho no bloquee más al Ayuntamiento. Debe, dicen, convocar a la oposición y tomar decisiones: se está en el tiempo de descuento para aprobar el presupuesto, el nuevo plan de proveedores y decidir si se acogen al rescate estatal. Valle lo confirma. Cualquier otra cosa no solventará los problemas de liquidez, ni el impago de nóminas, ni la crispación.