A sólo 50 kilómetros de Sevilla, entre los restos de una antigua mina de cobre y rodeada de un privilegiado entorno natural, se ubica La Reserva de El Castillo de las Guardas, uno de los mayores parques de animales de Europa, donde conviven animales de más de 100 especies diferentes.  Desde el pasado martes, sus propietarios cuentan con un miembro que se suma a los 1.000 animales que habitan en cautividad en el parque en condiciones similares a las de su hábitat natural. "Cada vez que nace una cría es como si fuera un hijo más en nuestra familia", afirma Tini Delgado, una de las propietarias de la reserva.

El nuevo inquilino, del que aún no se sabe el sexo y que ha sido bautizado con el nombre de la dueña, es una cría de hipopótamo que ha nacido de forma natural y  pesa 25 kilogramos. Junto a sus padres, Paco y Francisca, es el tercer ejemplar que habita en la reserva, ya que la anterior cría se encuentra actualmente en las instalaciones de Río Safari, en Elche.

El nuevo animal permanece junto a su madre, "que le da de mamar dentro del agua, donde también nació", explica Tini, mientras que el padre ha sido separado temporalmente para "evitar que haga daño a la cría". Una vez que ésta tenga el tamaño suficiente, el macho será devuelto a la piscina,"donde convivirán los tres en familia". La longevidad media de estos animales se sitúa entre los 40 años en estado silvestre y los 50 en cautividad. Mientras que los machos alcanzan su madurez a los siete años, las hembras lo hacen antes de los seis.

El hipopótamo no ha sido el único animal que ha nacido en cautividad este año en la reserva, ya que, según explicó la propietaria, han sido muchas las especies que han procreado esta temporada. "Han nacido crías de cebra, osos pardos, leones, tigres, bisontes americanos, guanaco, oryx, antílopes africanos y diferentes especies de aves", añade Tini.

La reserva cuenta también con cuatro nuevos rinocerontes blancos, procedentes de Sudáfrica, y  están a la espera de recibir una familia de chimpancés, que serán trasladados desde el parque de Elche. "Ahora trabajamos para preparar la zona donde habitarán los animales que se podrán visitar a finales de septiembre", explica la propietaria .

Este año el parque ha recibido alrededor de 120.000 visitas, sobre todo en los meses de primavera y otoño, ya que el verano es su temporada baja. Esta cifra es bastante importante si se tiene en cuenta la crisis actual, que merma los presupuestos de las familias para  actividades lúdicas y la incesantes lluvias del invierno pasado. "Durante todo el año recibimos visitas de todo tipo: desde familias con niños pequeños a parejas jóvenes. Durante la semana atendemos principalmente, las reservas que realizan desde los centros escolares", dice Tini.

Esta reserva natural abrió sus instalaciones en El Castillo de las Guardas hace 10 años. "Tenemos otro parque en Alicante, pero siempre hemos tenido la ilusión de contar con un parque grande donde los animales pudieran vivir casi en libertad, como en su hábitat", recuerda Tini, quien señala que "el pantano con el que cuenta el parque es fundamental, porque facilita el agua para las especies".

En la reserva trabajan,  además del personal de mantenimiento, una decena de cuidadores que se encargan de atender diariamente a los animales, mil y uno más desde esta semana.