El PP intenta zanjar la polémica creada por el enchufismo de personal afín al partido en los talleres de los distritos con el abandono voluntario de varios familiares de ediles populares cuyos contratos fueron denunciados por el Grupo Municipal Socialista. Esta renuncia se produce después de que el pasado lunes el alcalde de la ciudad, Juan Ignacio Zoido, calificara de "poco estética" la presencia de estos trabajadores. El Ayuntamiento, que pide disculpas por haberse producido "una mínima grieta en el procedimiento", niega que exista una trama orquestada al recordar que el 61% de los contratados ya lo estaban con el anterior gobierno y que en dicha plantilla existen militantes del PP, PSOE e IU.

"El alcalde ha trazado una línea roja en este asunto respecto a la actitud mostrada por el anterior gobierno". Con esta frase defendió ayer el delegado de Participación Ciudadana y Coordinación de Distritos, Beltrán Pérez, la actuación llevada a cabo por el Ayuntamiento tras las denuncias realizadas por el PSOE sobre la contratación en los talleres de distrito. En primer lugar, el edil popular -que compareció junto al portavoz municipal del PP, Juan Bueno- mostró los informes solicitados a cinco de las seis empresas que se encargan de contratar a dicho personal en los que se afirma que "no existe ningún tipo de presión por parte de los distritos o del Ayuntamiento para seleccionar a los trabajadores y que dicho procedimiento obedece sólo a cuestiones profesionales". En este sentido, Pérez recuerda que el 80% de las empresas que desarrollan las actividades en los talleres son las mismas que operaban en el anterior mandato. La bolsa de aspirantes se conforma con las solicitudes (curriculos) que llegan a estas empresas a través de los distritos, del Servicio Andaluz de Empleo (SAE) o directamente a las sociedades.

El número de currículos que recibe un distrito es variable, aunque pueden alcanzar los 700, razón por la cual el Ayuntamiento entiende que en este elevado grupo se incluyen afiliados del PP o de cualquier otro partido, una condición que "no influye" a la hora de ser contratado, ya que la selección -en palabras de Pérez- es "limpia, libre y sin filtro alguno". Como ejemplo de esta claridad destacó que de los 534 monitores que trabajan en los talleres (70 coordinadores), 327 ya habían ocupado este puesto con el gobierno de PSOE e IU, lo que significa el 61% de los contratados.

Todas estas explicaciones dadas por Beltrán Pérez le sirvieron para desmentir que exista una trama de "enchufismo" como viene denunciando el principal grupo de la oposición. Sin embargo, el PP quiere ir más allá y pretende dar por zanjada esta polémica con el abandono de familiares de concejales populares contratados en los distritos. Zoido ya advirtió el lunes que era "poco estético" que esta situación se estuviera produciendo. Cuatro días después el gobierno anuncia que cuatro de estos familiares ya han abandonado sus puestos de trabajo en los talleres. En concreto, los que han renunciado mantienen un grado de consanguineidad de prima, cuñado y hermano de concejales, a los que se une la novia de un edil. Los talleres en los que trabajaban pertenecían a los distritos Norte, Nervión y Sur (en este último, dos). A última hora de ayer fuentes del gobierno local informaban de que se había detectado el caso de otra prima de un concejal con contrato en el Distrito Norte que, con toda probabilidad, abandonará su trabajo en los próximos días.

Beltrán Pérez aclaró que el Ayuntamiento no ha rescindido el contrato de estas personas al no tener competencias para ello e insistió en que dichos trabajadores dejaron su empleo "voluntariamente" tras las declaraciones de Zoido. El concejal aseguró que el Grupo Popular ya le ha ofrecido a la oposición la posibilidad de acceder a la información facilitada por las empresas.