La estancia media de los turistas que visitan Sevilla no alcanza los dos días. Pese al incremento constante de viajeros, que ha batido sus récords este mes de junio, los alojamientos de la ciudad no son capaces de mantener más de dos noches de media a la mayoría de sus clientes. Sevilla suele ser un lugar de paso para aquellos que hacen una ruta más amplia por Andalucía, o de visita obligada a quienes se dirigen luego a las playas de Cádiz y Huelva.

La capital andaluza no es capaz de competir con otras ciudades andaluzas como Granada, donde los turistas suelen pernoctar durante tres días. Cierto es que Granada tiene la Alhambra y en ella ha de pasarse al menos un día para visitarla, pero la capital andaluza podría ofrecer otros atractivos para alargar las visitas.

El gobierno local saca pecho del crecimiento del número de turistas e incluso se atreve con comparaciones arriesgadas. Así, dijo hace unos días que sólo el Real Alcázar supera en visitas a todos los museos de Málaga. Cualquier malagueño podría responder con los datos de la Encuesta de Coyuntura Turística de Andalucía, que refleja que los viajeros pasan una media de 8,7 días en esta provincia, la estancia más alta de toda la comunidad, que tiene una media por encima de los siete días.

En este informe, que analiza el conjunto de la provincia y no sólo la capital, Sevilla tiene una estancia media de 3,2 noches, algo por encima de las 1,9 que refleja la Encuesta de Ocupación Hotelera del Ayuntamiento de Sevilla.

Sólo durante la Exposición Universal de 1992 logró Sevilla ampliar el número de noches que los visitantes pasaban en la ciudad. De aquello hace ya 22 años y cientos de campañas de promoción que no han logrado el objetivo, quizás porque estas campañas siempre promocionan lo mismo: la Catedral y el Real Alcázar. Son las dos joyas de la ciudad y pueden visitarse en un día, pero quizás la idea de vender únicamente estos monumentos termina eclipsando otras opciones y provocando una estancia más corta de los turistas.

Los dos monumentos subieron el pasado mes de junio en número de visitantes, la Catedral en un 14% y el Alcázar en un 8%. Pero faltan por conocer los datos actuales del resto de museos y monumentos, del que los más recientes que se han hecho públicos son del verano pasado.

El Museo de Bellas Artes, la segunda pinacoteca de España tras el Prado, perdió en 2013 un 20% de visitantes en relación con el año 2012. Desde 2008, la caída es mucho más acusada, del 48%. La Mestranza y el Museo Taurino, el tercer monumento más visitado de la ciudad, perdieron un 9% de visitas. Más contenida, del 2%, fue la caída en el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo. El Museo Arqueológico se estancó en el mismo número de visitantes, mientras que sólo hubo dos edificios que crecieron: la Casa de Pilatos y la Torre del Oro, la primera un 23% y la segunda un 8%.

Si los datos de 2014 mantuvieran esta tendencia, quizás deberían enfocarse de otra manera las campañas para atraer turistas. El presidente de la Asociación de Hoteleros de Sevilla, Manuel Otero, ya alertó hace unos días de que la rentabilidad de los hoteles ha bajado un 50% en los últimos años, según un estudio realizado por la patronal. "Nos alegramos de los récords de visitantes, pero quedarse sólo con eso es contar una parte de la historia. Para que los turistas pasen más jornadas en Sevilla, y con ello aumente la rentabilidad, es necesario crear y promocionar nuevos productos", apuntó el representante de los hoteleros.

Otero dijo que a la ciudad le vendrán bien el museo de la cerámica que se acaba de abrir en Triana y el acuario, que podría estar inaugurado después del verano. Incluso propuso la opción de explotar el turismo religioso, un subsector que está muy en auge en todo el mundo. "Creemos que es fundamental y en una ciudad como Sevilla mucho más. No sólo se limita a la Semana Santa. Durante todo el año hay muchas actividades y celebraciones que mueve al turismo religioso en todo el mundo. Podría haber un museo dedicado a las cofradías y sería un atractivo más para la ciudad. El museo de la Macarena es de lo mejorcito que hay ahora mismo en Sevilla. La explotación turística de la Catedral es un ejemplo del interés del turismo religioso", explicó Otero.

También se echa en falta una campaña conjunta y global con la provincia. Localidades como Carmona, Osuna, Écija o las sierras Norte y Sur, entre otras, podrían constituir un atractivo más y ser lugares que puedan visitarse en excursiones de un día partiendo desde la capital. Pero no hay ningún proyecto en que Sevilla y la provincia vayan de la mano. Itálica es otro conjunto monumental que apenas está explotado. Han tenido que ser los miembros de una asociación privada de amigos de Itálica los que promuevan ante la Unesco la declaración de patrimonio de la humanidad de la antigua ciudad romana, en la que nacieron Adriano y Trajano.

Las últimas estadísticas de turismo reflejan el perfil de un visitante de bajo coste, que suele llegar en compañías aéreas baratas y gastar poco en la ciudad. Prueba de ello es que ha aumentado un 61% el alojamiento en apartamentos, siempre más baratos que los hoteles y que permiten ahorrar algunas comidas al tener cocina propia. Según los datos de la Junta, quienes visitan la provincia de Sevilla gastan una media de 80 euros al día.