La Fundación Mezquita de Sevilla quiere construir un gran templo junto al río Guadalquivir. Los representantes de este colectivo islámico están estudiando posibles ubicaciones para levantar su proyecto estrella, un centro cultural islámico para el que el Gobierno de Malasia acaba de donarles un millón de dólares. La fundación aspira a comprar los terrenos de Altadis en Los Remedios, si bien es muy difícil que puedan construir en este solar la gran mezquita. Máxime cuando la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico emitió hace unos días un informe en el que dejó claro que deben mantenerse todos los edificios de la fábrica de tabacos, que ve como el "resultado de un proyecto unitario de gran valor arquitectónico".

Otra opción es un solar cercano al río en el barrio de Triana, por el que los musulmanes estarían dispuestos a pujar. También se han estudiado otras posibles ubicaciones, como Los Bermejales, donde ya fracasó un proyecto de mezquita impulsado por la Comunidad Islámica de Sevilla, o alguno de los solares que siguen sin uso en el entorno del centro comercial Los Arcos. En cualquier caso, la preferencia de la Fundación Mezquita de Sevilla es el entorno del Guadalquivir, según explicó ayer a este periódico el portavoz de esta entidad, Jalid Nieto.

El representante de la fundación estima que para hacer realidad el proyecto hacen falta entre nueve y diez millones de euros. Hace unos días recibieron la primera donación, de un millón de dólares (unos 900.000 euros al cambio) entregada por el Estado malasio. En los próximos meses esperan seguir recibiendo el dinero para ir avanzando en este proyecto. La fundación sólo apuesta en estos momentos por erigir el templo en suelo privado, después de las experiencias negativas en sus intentos anteriores de construir mezquitas en terrenos públicos. "Queremos que esto no le cueste nada al contribuyente, aunque tardemos un poco más", expuso Nieto.

El proyecto del centro cultural islámico está descrito en la web de la fundación. "Queremos hacer que el espacio arquitectónico del proyecto no sólo luzca por su belleza externa, sino que sea un foco constante de actividad. Será diseñado de forma que sea acogedor no sólo para los miles de musulmanes de la ciudad y visitantes, sino para los vecinos de ésta también. Un lugar abierto en principios y arquitectura", afirman los impulsores del proyecto.

Este centro cultural contará con una recepción, una sala de conferencias dotada de medios audiovisuales, oficinas de uso interno y para el público, una sala de oración, una biblioteca especializada en la difusión y estudio del mundo islámico y el legado andalusí, comedores comunitarios, jardines, aulas para impartir talleres y clases, tiendas, una cafetería y un restaurante, y un aparcamiento. El objetivo de la fundación es hacer un proyecto atractivo para "el creciente turismo musulmán". En cuanto a la mezquita, "tanto el interior como el exterior de ésta se diseñará de forma lo más similar posible a las miles de mezquitas que hubo y de las que aún quedan vestigios en esta gran ciudad, un espacio que sume al patrimonio arquitectónico y cultural de Sevilla".

La comunidad islámica pretende también ofrecer distintos servicios en este centro, de manera que puedan recibirse delegaciones y autoridades, "con el fin de ser el referente del Islam no sólo en Sevilla y Andalucía, sino en España". Además, tendrá una sección médica, se celebrarán bodas, se organizarán peregrinaciones a la Meca y también se podrán gestionar entierros. También quieren recibir visitas de colegios e institutos, traducir y publicar textos andalusíes y poner en marcha un comedor comunitario y social, que contribuya a "cubrir las necesidades básicas de personas con dificultades".