No ha tenido que pasar mucho tiempo para que el batacazo electoral del PP sevillano en las recientes elecciones municipales se cobre su primera víctima. Eloy Carmona, teniente de alcalde de Tomares y diputado provincial, cesó ayer como número dos del partido en la provincia. La Junta Directiva Provincial confirmó la salida del secretario general, quien es mano derecha y persona de suma confianza del regidor tomareño, José Luis Sanz, que aspiró en su día a la presidencia del PP andaluz y quien ha revalidado la Alcaldía de este municipio del Aljarafe con mayoría absoluta, todos un logro en las actuales circunstancias. La renuncia de Carmona supone la consolidación de Virginia Pérez como mujer fuerte en el partido, una política muy vinculada a Juanma Moreno Bonilla, presidente de los populares andaluces.

La foto que ilustra esta información evidencia, como pocas, el relevo que comienza en el PP de Sevilla, un partido al que la fecha del pasado 24 de mayo no lo ha dejado indiferente. La pérdida de alcaldías como Mairena del Aljarafe, Espartinas o la propia capital ha debilitado unas siglas que ya de por sí tenían escaso peso ejecutivo en la provincia. Ayer se dio el primer paso para la transformación que busca Moreno Bonilla en el PP andaluz. La primera "víctima" de esta renovación ha sido el hasta ayer secretario general de los populares sevillanos, Eloy Carmona, un hombre lastrado también por causas judiciales.

La Junta Directiva Provincial se celebró en la sede del PP de Sevilla, en la calle Rioja. El encuentro, al que no asistió Zoido, no fue demasiado largo -el aire acondicionado no funcionaba- y en él intervino brevemente el presidente de los populares sevillanos, Juan Bueno; el propio Eloy Carmona y varios representantes del PP en la provincia. En dicho encuentro se hizo oficial la renuncia de Carmona a seguir ocupando el cargo de número dos del partido. Según indicaron fuentes del PP a este periódico, el teniente de alcalde de Tomares comunicó previamente su intención de abandonar dicho puesto por correo electrónico.

"Ha dimitido antes de que lo cesaran", señalan personas muy vinculadas al partido. Carmona aprovechó su intervención en la junta directiva para destacar que los últimos años han sido "muy duros" en el "terreno político y personal". El que fue hasta ayer número dos del PP sevillano pidió disculpas en su despedida por "los problemas que haya podido tener con algunas personas". No obstante, según afirman fuentes del partido, este diputado provincial hacía tiempo que no ejercía el cargo de secretario general.

Carmona, que seguirá con su acta de concejal en Tomares y como diputado provincial, está imputado actualmente en dos causas relacionadas con el presunto pago con fondos municipales de informes falsos y de retribuciones municipales indebidas. El caso Tomares ha llegado ya al Tribunal Supremo, del que ha sido exculpado el alcalde tomareño, José Luis Sanz (aforado por ser senador), al considerar que no existen indicios que demuestren delitos de prevaricación y malversación de caudales públicos.

Dicha causa fue uno de los motivos que truncaron la carrera de Sanz a la presidencia del PP andaluz. La otra razón, la llegada de Moreno Bonilla bajo el amparo de Javier Arenas. De hecho, el cese de Carmona se percibe como una maniobra del presidente de los populares andaluces para que la nueva estructura del partido en Sevilla se nutra de personal de su confianza. Por ahora, la secretaría general del PP en la provincia se queda vacante, pues Juan Bueno optó ayer por no elegir a ninguno de los 22 vocales que conforman el comité ejecutivo provincial para dicho cargo, que sólo puede ser ocupado por ellos.

Estas funciones las asumirá -sin ser nombrada como tal- la portavoz popular en la Diputación y concejal en Gines, Virginia Pérez, que ejerce desde hace poco más de un año de coordinadora general del PP, puesto que no existía antes en el partido. Pérez es persona de confianza de Moreno Bonilla y cuñada de Ricardo Tarno, diputado nacional, ex alcalde de Mairena del Aljarafe y político muy vinculado a Arenas.