El alcalde de Sevilla, Juan Espadas (PSOE), defendió ayer las "medidas inmediatas" promovidas por su gobierno con el objetivo de suprimir 545 plazas de zona azul en el entorno del campus universitario de Pirotecnia, 200 plazas en Bami y 100 plazas en el entorno de la avenida de Luis Montoto. Frente a las críticas del PP y de Ciudadanos, el alcalde responde que seguirá su propio "ritmo" con las medidas necesarias para "acabar con la ampliación de la zona azul" que consumó el PP en 2014.

En declaraciones a la prensa, Espadas reaccionó a las críticas de Ciudadanos, que mantiene que la revisión parcial de la zona azul se hace mediante "un decreto" como hizo el gobierno del PP para ampliarla, y a las críticas del ex alcalde Juan Ignacio Zoido, quien recuerda que Espadas prometió derogar por completo la ampliación de la zona azul pero sólo ha realizado su "derogación parcial".

Espadas explicó que la resolución de revisión de la zona azul implica "medidas inmediatas para que colectivos afectados dejen de estarlo lo antes posible, sin perjuicio del objetivo final de acabar con la ampliación de la zona azul". El alcalde ha encargado una consulta al secretario general del Ayuntamiento para esclarecer si la ampliación de la zona azul vía decreto de Alcaldía por Zoido y, no mediante las ordenanzas fiscales, podría suponer la "nulidad" de la ampliación para "terminar con la ampliación de la zona azul sin costes" para el Ayuntamiento y evitar "indemnizar" a Aussa en caso de romper unilateralmente y sin justificación el contrato. El regidor socialista explicó que se publica en el BOP la propuesta de supresión de plazas porque "los servicios jurídicos" estipulaban que pese a tratarse de una medida "pactada con la empresa, no se eximía al Ayuntamiento de un trámite de audiencia y consulta previa que sólo se puede hacer mediante resolución del delegado" de Movilidad, en este caso Juan Carlos Cabrera.