TIEMPO El último fin de semana de abril llega a Sevilla con lluvia

DERBI Horario y dónde ver el Betis-Sevilla

Sevilla

El rector deja claro que no acudirá a una asamblea sobre el Plan Bolonia

  • La mesa del Claustro aprueba una declaración de apoyo al Espacio Europeo · Joaquín Luque mostró el vídeo de los actos violentos de Geografía e Historia el pasado día 2

"No me voy a someter a una asamblea no representativa". Con estas contundentes palabras, el rector de la Universidad de Sevilla, Joaquín Luque, descartaba ayer ante el Claustro de la Hispalense la posibilidad de convocar una asamblea de entrada libre para debatir sobre el Espacio Europeo de Educación Superior (Plan Bolonia), una de las principales reivindicaciones de un sector del estudiantado contrario al proceso.

Con menos expectación de la prevista, el salón de actos de las facultades de Filosofía, Psicología y Pedagogía (en el campus de Ramón y Cajal) acogió ayer un Claustro ordinario en el que, entre otros asuntos, se debatió sobre el Plan Bolonia. Tres horas de debate que no sirvieron para modificar ninguna posición ya adoptada previamente a la celebración del Claustro. Eso sí, fue evidente que la gran mayoría de los representantes apoyan un proceso que es de cumplimiento obligatorio por un real decreto.

Luque dejó muy claro que el Claustro es el máximo órgano representativo de la Universidad y que cualquier debate debe celebrarse en su seno y no en "una asamblea descontrolada". Lo contrario "sería atentar contra nuestro sistema de representación y gobierno, que, por cierto, es el que tiene una mayor representación estudiantil de toda Europa, el 30%", dijo Luque.

El rector aprovechó el Claustro para volver a mostrar su preocupación por la "deriva violenta" que se está observando en un sector de los estudiantes anti-Bolonia (dijo que no representaban ni el 1 por mil del estudiantado), recordando algunos inicidentes acaecidos en los últimos meses y justificando el cierre parcial de las dependencias rectorales para garantizar la seguridad del personal y del edificio, así como el "desarrollo democrático de la Universidad".

Ante la acusación de Francisco Javier Martín -estudiante claustral- de que el rector ha iniciado una campaña de "desprestigio" y "criminalización" del colectivo estudiantil, Joaquín Luque asestó su golpe definitivo: proyectó ante la mirada atónita de los claustrales que aún permanecían en el salón de actos (el debate duró más de tres horas) el vídeo registrado por las cámaras de seguridad de Geografía e Historia en el que se observa los actos violentos de un grupo de estudiantes el pasado 2 de diciembre al finalizar la Junta de Facultad en la que se habían aprobado las nuevas titulaciones que impartirá este centro. Las imágenes no dejan lugar a dudas: unos 50 estudiantes forcejean con el cinturón de seguridad, amenazan a los miembros de la Junta y les lanzan una lluvia de bolas de papel. Además, otro estudiante claustral acusó a los anti-Bolonia de haber intentado impedir su entrada al pasado Consejo de Gobierno del 20 de noviembre. "Llegaron a escupirme en la cara", dijo.

Con la práctica totalidad del Claustro a su favor en esta cuestión, Luque leyó una declaración solemne de apoyo a Bolonia que contó con la aprobación de la mesa, pero que no fue sometida a votación. En el texto, el rector muestra su "clara y firme defensa del modelo de Universidad Pública" y su "compromiso de impulsar que todos los ciudadanos y ciudadanas puedan acceder por igual, sin distinción de ninguna índole, a los estudios universitarios". De esta forma, Luque sale al paso a los que argumentan que Bolonia supondrá una "privatización" de la Universidad.

El rector también mostró su "defensa radical de las humanidades y las becas" y el "firme convencimiento de que Bolonia ayudará a la "construcción de la ciudadanía europea, a partir del respeto de su diversidad cultural".

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios