Andalucía Tech, el proyecto de campus tecnológico impulsado por las universidades de Sevilla y Málaga para crear un eje de alta investigación y desarrollo entre las dos ciudades, se gobernará mediante una fundación pública en la que las dos universidades tendrán el mismo peso.

Como director general de esta fundación se buscará a "un experto internacional e independiente de reconocida experiencia en la gestión", según aseguró ayer a este periódico el vicerrector de Transferencia Tecnológica de la Universidad de Sevilla, Ramón González Carvajal. Aunque no se quiere admitir explícitamente, en el ánimo de esta decisión está el evitar los posibles roces que en un futuro (ahora mismo se vive una luna de miel) puedan surgir entre las dos instituciones sobre los criterios de dirección del campus.

En el patronato de la fundación rectora estarán representadas las dos universidades (que tendrán más del 50% para garantizar su condición de campus) y los organismos, empresas e instituciones agregados al proyecto, entre los que destaca la Junta de Andalucía. "Este patronato será el encargado de fijar un plan estratégico que se le entregará al director general para que lo ponga en marcha, el cual contará con herramientas modernas y ágiles para cumplir con su trabajo", aseguró González Carvajal, quien también recordó que este sistema se inspira en el de las universidades norteamericanas, "donde no es el mismo el perfil el que se busca para contratar a un rector o a un gestor universitario".

La sede del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, en Madrid, acogió ayer la presentación del proyecto Andalucía Tech ante el jurado encargado de evaluar las 22 candidaturas que aspiran a la ansiada denominación de Campus de Excelencia Internacional (CEI), un programa que pretende colocar a un grupo de universidades españolas a la altura de las más prestigiosas de Europa en el horizonte de 2015. Sin embargo, no es sólo una cuestión de denominación. En juego está una importante financiación adicional, hasta 175 millones a repartir sólo en 2010 si se suma el programa Innocampus.

Los responsables del Andalucía Tech mostraron ayer su firme disposición de seguir con el proyecto aunque no consigan la denominación CEI. "El Campus de Excelencia ha sido sólo la excusa para iniciar un proyecto que va mucho más allá. Vamos a seguir adelante pase lo que pase". Eso sí, el dinero que supondría la calificación como CEI sería una importante ayuda para cubrir los 143,4 millones de euros en los que está presupuestada la puesta en marcha del campus hasta 1015. Los cálculos provisionales apuntan a que el CEI podría suponer un quinto del coste total del Campus.

La presentación del proyecto ante el jurado, formado por expertos internacionales, la hicieron al alimón el rector de la Hispalense, Joaquín Luque, y la rectora de la Universidad de Málaga, Adelaida de la Calle. Sólo tuvieron cinco minutos para explicar el plan, pues de los diez con los que contaban los otros cinco lo dedicaron a la proyección de un vídeo que se puede ver en la página web de la Universidad de Sevilla (www.us.es).

"Satisfacción". Ésa fue la palabra elegida por el vicerrector de Transferencia Tecnológica de la Hispalense para definir la actuación de los dos rectores. "Lo importante es que se ha hecho un trabajo muy bueno y que, como mínimo, estamos a la altura de los mejores proyectos". Por su parte, el director de Comunicación de la Universidad de Sevilla, José Álvarez, afirmó que "lo más importante es que estamos juntas las dos universidades de las dos ciudades que representan el 40% del sistema educativo, de su población y del Producto Interior Bruto de la comunidad autónoma".