¿Pura coincidencia?, ¿filtración?, ¿oportunismo político? Una plataforma independiente de profesionales presentó ayer un proyecto para los terrenos de Tablada que, en sus líneas similares, es prácticamente igual al que el candidato del PSOE a la Alcaldía, Juan Espadas, diese a conocer a la opinión pública el pasado 20 de octubre.

La similitud entre los dos proyectos es tal que el propio equipo de Espadas se apresuró ayer a mandar una nota a las redacciones en la que se afirma que su idea "va calando entre los colectivos ciudadanos interesados en participar en el objetivo de diseñar el futuro parque metropolitano desde la participación ciudadana", además de acusar a su oponente, el popular Juan Ignacio Zoido, de "no tener un modelo" para la antigua dehesa.

Una vez ganada en los tribunales la condición de espacio verde para Tablada, recogida en el PGOU y el Potaus, sólo falta aclarar cómo hacer que estos terrenos de 367,4 hectáreas, actualmente en manos del holding empresarial Tablada Hispalis, vuelva a manos públicas. Es decir, todo está maduro para revitalizar el debate de Tablada, que seguro que estará presente en la campaña electoral, aunque la Plataforma Ciudadana Pro Tablada Verde pretende promover un pacto entre los partidos que evite este enfrentamiento. Algo francamente difícil a medida que se acerque el 22 de mayo, fecha de las elecciones municipales.

Grosso modo, tanto Espadas como la Plataforma Ciudadana Pro Tablada Verde, coinciden en proponer un gran parque público autofinanciable en el que, además de las funciones clásicas de un espacio verde, se acojan originalidades como una playa fluvial, huertos sociales, un centro hípico y zonas para deportes naúticos y aeronaúticos. También el rechazo a un hipotético traslado del real de la Feria de Abril a esta zona. Eso sí, mientras que la propuesta de Espadas fueron sólo palabras, la de la plataforma es un documento más trabajado, con un plano en el que se especifican la distribución de los usos y una estimación de lo que costaría hacer el parque y su mantenimiento inicial.

La Plataforma, consciente de los tiempos de crisis, asegura que su proyecto es austero y su construcción no costaría más de 20 millones de euros, mientras que el mantenimiento anual ascendería a 1,5 millones de euros, que se obtendrían del alquiler de las instalaciones deportivas y de otro tipo. Como principio general, los usos se concentrarán en el norte y el oeste del parque (las más cercanas al barrio de Los Remedios), dejando las zonas sur y este más asalvajadas.

Como eje central del espacio se contempla conservar la antigua pista de la base militar de 1.800 metros, que se convertiría en un centro de deportes aéreos, como el paramotor, el paracaidismo, el aeromodelismo, etcétea. La idea permitiría tener una gran zona central de vegetación herbácea (como la vemos hoy en día) de mantenimiento muy barato y propicio para "los insectos, las aves y otros muchos géneros de fauna".

La playa fluvial, que se completaría con una zona para deportes sobre arena, pretende emular a las que existen en Roma o Berlín, con depuración natural y plantas de grava y arena. En el norte se ubicaría un "parque adehesado", en cuyos bordes irían pistas deportivas de todo tipo y un espacio multiuso para conciertos, mítines etcétera. Por su parte, la zona sur acogería la mayoría de los huertos sociales, la recuperación de los naranjales ya existentes pero muy degradados y un gran centro de actividades hípicas que se aprovecharía de las cocheras municipales de caballos. También se recuperarían las antiguas alquerías para convertirlas en un centro de interpretación de Tablada. Todo unido por senderos ecológicos para peatones y bicicletas, así como vías para pasear a caballo.

En el extremo sur, paralelo al cauce del Guadaíra, se crearía un humedal que "serviría como puerta de Doñana" y en el que podrían anidar todo tipo de aves.