A cuartos como primera de grupo. Así, como resumen, parecería que España ha completado una primera fase espléndida que refuerza su posición de favorita al título de la Eurocopa. A decir verdad, no ha sido así, pero ha hecho lo que tenía que hacer. Probablemente sin el brillo que se le demanda a una selección espectacular, pero también con la madurez de aguantar el pulso psicológico que planteó Slaven Bilic para convertir a Croacia en uno de los adversarios más serios que ha tenido la España multicampeona. Jesús Navas marcó al final para dejarlo todo en su sitio. Más o menos en su sitio.

Ahogado el centro del campo por la acumulación de efectivos croatas, España no encontró nunca hueco ni se sintió jamás cómoda en el césped de Gdansk. Y todo eso es mérito de Bilic, un seleccionador visceral pero con la cabeza bien puesta capaz de reorganizar por completo a su equipo sin que se desordene ni el más pundonoroso de sus hombres. España ofreció las mismas dudas que contra Italia, incluso peores, pues su pertinaz iniciativa se tradujo en escasísimas ocasiones de gol, hasta el punto de que las más claras fueron croatas.

Xavi, Iniesta y Silva tuvieron dificultades muy importantes para crear juego. La maraña croata, con hasta cuatro jugadores por el centro y otros dos muy abiertos, convirtió el toque, toque, toque en la más inservible de las parsimonias. Croacia jugó a tener el partido abierto hasta el final (y si Italia no hacía su parte, tanto mejor) y a punto estuvo de tener a sus pies a la campeona mundial y continental. La cabeza de Rakitic y las manos de Casillas plasmaron por qué España está en cuartos y Croacia no, pues un gol ajedrezado a veinte minutos del final habría sido un tiro mortal para la selección esta vez celeste, sí celeste.

España tuvo dos problemas: Croacia y Torres. Arbeloa no llegó a esa categoría. Y no, no es una cuestión técnica ni de gustos, sino de prestaciones. Torres se desmarca de fábula y tiene remate, pero ofrece escasa descarga en corto, se asocia poco, ralentiza bastante el juego y se aburre entre los centrales. Iniesta, Silva y Xavi se buscan entre sí porque Torres no les ofrece soluciones en pared, Necesita abrirse para recibir o que la seda de los medios españoles encuentre un pase en ventaja que nunca llegó. Gloria para Corluka y Schinfeld. Del Bosque, se quiera o no, deslizó con los cambios cuáles son sus opciones: Navas para desatascar y Cesc y (o) Negredo arriba.

Con la tranquilidad de saber quién tenía que arriesgar, España jugó con fuego. Hizo lo de siempre, pero mucho peor porque encontró muchísimas dificultades y tampoco Iniesta y Silva estuvieron tan finos entre tanta pierna. Croacia esperó y esperó. Italia marcó relativamente pronto, su parte estaba hecha, y todas las miradas se centraron en Gdansk. 

Con los minutos Croacia se vio obligada a exponer más y Bilic le dio la vuelta al equipo con un doble cambio muy ofensivo: Jelavic y Perisic por Vida y Pranjic. Y España, cierto, tembló. Casillas salvó el partido ante Rakitic y luego despejó bien un disparo de Perisic. Ya había tenido opciones mucho mejores Croacia que España, harta ya de balón.

Del Bosque había sacado a Navas primero y a Cesc después para intentar aprovechar los lógicos huecos que dejaría un rival que acumulaba hombres arriba y que naturalmente los perdía de la medular, tras una hora larga en la que ganó la partida ahí. Dicho y hecho, al estirarse Croacia España empezó a encontrar césped por donde correr. Aguantado el tremendo pulso psicológico de verse fuera por cualquier fatalidad, Iniesta rompió por el centro para, con toda frialdad, ceder la gloria a Jesús Navas y zanjar un partido para la reflexión, también para la positiva: pulsaciones en su sitio, segundo partido de tres con la portería a cero (vital en un torneo corto), nunca estuvo eliminada (desde el primer gol de Italia hasta el tanto de Navas fue segunda) y desenlace razonable que deja a España líder del grupo C. A esperar rival y a seguir creciendo. Aunque en cuartos ya no se podrá jugar con el reloj…

Ficha técnica:

0.- Croacia: Pletikosa; Vida (Jelavic, min. 66) , Corluka, Schidenfeld, Strinic; Rakitic, Vukojevic (Eduardo, min. 80); Srna, Modric, Pranjic (Perisic, min. 66); Mandzukic.

1.- España: Casillas; Arebeloa, Piqué, Sergio Ramos, Jordi Alba; Xavi Hernández (Negredo, min. 89), Busquets, Xabi Alonso; Silva (Cesc Fabregas, min. 71), Iniesta y Fernando Torres (Jesús Navas, min. 61).

Goles: 0-1, min. 87: Jesús Navas

Árbitro: Wolfgang Stark (ALE). Mostró cartulina amarilla a los jugadores de Croacia Corluka (min. 27), Srna (min. 44), (Strinic) min.53) y Rakitic (min. 90)

Incidencias: encuentro correspondiente a la tercera jornada de la Eurocopa del Grupo C, disputado en el estadio Arena Gdansk ante la presencia de 39.000 espectadores.

Get Adobe Flash player