A la sombra de los ficus de los Jardines de Murillo se presentó la tercera edición de Luces de barrio. Un proyecto del Área de Hábitat Urbano del Ayuntamiento que esta Navidad implica a cinco colegios de cinco distritos de Sevilla. Su intención es reinterpretar la tradición navideña y poner luz en lugares excepcionales de la ciudad uniendo a una treintena de profesionales de distintas disciplinas con más de 230 escolares para cambiar la fisionomía de esos emplazamientos educativos.

La primera edición, celebrada en 2015, involucró a calles de vecinos y la segunda a huertos urbanos. La que ya está en marcha se desarrolla en colegios y con los niños como protagonistas. Isabel Ojeda, directora de Cultura del Ayuntamiento, condujo el acto de presentación y explicó que precisamente los niños son el vínculo que une esta iniciativa con el Año Murillo. Ojeda recordó la importancia de los más pequeños en la obra del pintor y calificó a los participantes en Luces de barrio como “los murillos del siglo XXI”.

Los colegios públicos de Educación Infantil y Primaria San José Obrero en la Macarena, Huerta de Santa Marina en el Casco Antiguo, Andalucía en la Barriada Murillo, Vélez de Guevara en Torreblanca y Salvador Távora en Rochelambert han sido los elegidos y trabajan desde el pasado octubre con biólogos, arquitectos, educadores, paisajistas o fotógrafos en el programa Arboleda Digital. Las soluciones arquitectónicas que encuentren serán expuestas en un espacio-taller en la Casa Murillo del barrio de Santa Cruz del 20 de diciembre al 7 de enero. Posteriormente, serán instaladas en los colegios con el objetivo de que florezcan en la próxima primavera, cuando se desarrollará una jornada de puertas abiertas.

Las cinco iniciativas fueron presentadas por los propios alumnos, que se mostraron ilusionados con esta exploración de la naturaleza desde un prisma urbano. El San José Obrero se ha inspirado en una investigación de la NASA para generar gel de jardinería, el Huerta de Santa Marina quiere protegerse del calor y trabajará con enredaderas y plantas trepadoras, el Andalucía construirá un 'hotel' para insectos, el Vélez de Guevara recuperará la memoria de árboles talados en el pasado agujereando el suelo y el Salvador Távora se hará una ensalada con lo que cultiven en huertos portátiles de madera.

Paralelamente a estas propuestas se han realizado tres piezas reflexivas que también podrán visitarse en la casa de Bartolomé Esteban Murillo. Miguel Marín expondrá su obra experimental Recreos sonoros, que recoge momentos del proceso de construcción de los nuevos paisajes en los colegios. Surnames y Javier Vila utilizan lo audiovisual en Fuera de cuadro para narrar con todo aquello que no se ve en la toma la evolución del proyecto. Por último, el fotógrafo Óscar Romero mostrará en Retinas táctiles el diálogo entre los escolares y Luces de barrio formando un mosaico que pretende reflexionar sobre la infancia, los objetos, las manos o la luz.