La pelea de Sevilla se enconó en el número 7 de la lista, lo demuestran los cambios introducidos este martes por el comité andaluz. Además se evidencia que la reserva de ese puesto para un colaborador de la secretaria de Organización del PSOE de Andalucía, Susana Díaz, molestó al propio candidato a la Presidencia de la Junta de Andalucía, que barajó una lista de mayor consenso.

Y le enfureció por dos razones: porque el propio José Antonio Griñán había sacrificado ya alguna apuesta personal para conseguir ese acuerdo y porque la inclusión de Carmelo Gómez en ese puesto suponía relegar al 9 -con escasas opciones de salida- a una de las exigencias de José Antonio Viera, el ex secretario provincial, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, que, además fue interventor de Rubalcaba en el congreso federal. Y, por tanto, ello sólo avivaría la polémica. Hasta el punto de hacer estallar la situación y desencadenar la dimisión de Viera. Fue la gota que colmó el vaso y la que llevó al límite a Griñán, que podría haber sentido la deslealtad de su número dos.

Por ello, las correcciones introducidas ayer suponen un claro intercambio de cromos. Susana Díaz se habría visto obligada a dar marcha atrás e intercambiar los puestos 7 y 9 en favor de los críticos. Pero éstos, no obstante, habrían tenido que sacrificar a una de sus representantes, el número 6, Carmen Tovar, en favor de Carmen Martínez Aguayo, una propuesta personal de Griñán que de esta forma dejaría de manifiesto su autoridad.

La necesidad de que la lista sea cremallera habría jugado en contra de Tovar más que de María Jesús Montero. La consejera también es rubalcabista, está bien vista por ambos sectores y habría bajado ya dos puestos en respecto a las elecciones anteriores. El intercambio de Martínez Aguayo sólo podría haberse realizado ya con Verónica Pérez, pero Griñán no habría cedido porque ésta, junto con José Muñoz y Miguel Ángel Vázquez -que se quedó fuera- eran sus apuestas.

La lectura más llamativa de este lío interno es que un partido que tiene hoy 11 parlamentarios por Sevilla da por hecho que sólo tienen opción a ocho, dándose por derrotado. Socialistas históricos como José Caballos insistieron ayer en la urgencia de pasar página y centrarse en ganar las elecciones.