Izquierda Unida abordará el próximo mes una transformación contradictoria, ya que tratará de convertirse en un movimiento social y político más que en un partido, pero a la vez será una organización más centralista. Convocatoria por Andalucía, que fue creada en 1984 y es anterior a la propia IU federal, perderá su singularidad jurídica propia, aunque seguirá siendo una federación dentro de la organización. Será, así, más parecida a los grandes partidos, como PP y PSOE, que cuenta con federaciones en las comunidades, aunque están agrupadas bajo un único CIF. Finalmente, el coordinador general de IU, Alberto Garzón, ha moderado el primer borrador que se iba a aprobar en la asamblea que el partido celebrará el 12 de mayo. El cambio en la estructura federal también es una necesidad de adecuarse a la Ley de Financiación de los Partidos.

IU llega a esta Asamblea de Nuevo Modelo Organizativo y Estatutos obligada por las circunstancias económicas y políticas. De un lado, la centralización se debe a la necesidad de hacer frente a la deuda con un modelo jurídico más uniforme. Las organizaciones de Andalucía o de Asturias eran completamente autónomas, aunque estuviesen encardinadas en una dirección federal. Ahora, la dirección de Alberto Garzón será la que decida las grandes estrategias y la política de alianzas de su partido, en colaboración con las federaciones, pero sin contradicciones entre éstas. Esto hará más fácil el proceso de confluencia de IU con Podemos en todos los territorios, y es lo que había llevado a interpretar que los cambios sólo tenían por objetivo la absorción de la vieja confederación de partidos de izquierdas. La dirección de IU sostiene que "en ningún caso este proceso culminará con la absorción en otras formaciones políticas, es un proceso que busca precisamente lo contrario, fortalecer el espacio político para avanzar hacia los objetivos estratégicos que hemos decidido en común". Los acuerdos que IU alcancen en mayo deben materializarse en una próxima asamblea general.

IU-Convocatoria por Andalucía fue fundada en 1984, y tuvo como primer líder a Julio Anguita. En la actualidad, el coordinador general es Antonio Maíllo, quien está en consonancia con Alberto Garzón. No obstante, Maíllo cuenta con un notable grupo de críticos que han venido oponiéndose a lo que se entiende como una claudicación a los intereses de Podemos en Andalucía.

IU y Podemos fueron juntos en buena parte del territorio nacional bajo las siglas Unidos Podemos. La alianza electoral se reeditará con motivo de las elecciones municipales de 2019, pero ambos partidos deben ponerse de acuerdo en la fórmula. En Podemos también ha divergencias internas. La andaluza Teresa Rodríguez quería reeditar el modelo de las pasadas municipales, cuando Podemos, como tal no se presentó y sí sus militantes bajo nombres variados. Rodríguez perdió el referéndum interno, y Podemos, aunque vaya en coalición, tendrá que conservar su nombre.

Tampoco se ha acordado cómo acudirán estos partidos a las elecciones andaluzas. Se da por hecho que irán juntos, pero aún se desconoce la fórmula. IU y Podemos forman en la Cámara autonómica dos grupos parlamentarios distintos.