Un ajuste de cuentas con una víctima mortal. Pese a que aún no ha trascendido de forma oficial, ya que se ha decretado el secreto de sumario en torno al suceso, este sería el motivo principal que baraja la Policía como origen del tiroteo que tuvo lugar ayer, a plena luz del día, en la zona norte de Granada. Además de un hombre muerto también dos personas resultaron heridas por los disparos. Una de ellas en estado muy grave. Las dos fueron ingresadas en el hospital del Parque Tecnológico de la Salud (PTS). Se trata del tercer asesinato que sucede en este distrito, en menos de cuatro meses.

Apenas habían pasado cuatro días desde que los vecinos de esta zona de la capital granadina se movilizaran para exigir más presencia y vigilancia policial en sus calles, cuando el barrio volvió a vivir ayer otro trágico día de consternación, estupor, indignación, desconcierto y miedo. A plena luz del día, en torno al mediodía, los vecinos del número 45 de la calle Fray Juan Sánchez Cotán, situada en el barrio de La Paz, escucharon varios disparos. Atónitos, se asomaron a las ventanas y pudieron ver el cuerpo de un joven tendido en el suelo, sobre un charco de sangre, y dos personas más heridas.

Minutos más tarde, el servicio de Emergencias del 112 recibía un aviso que informaba de que había en principio una persona muy grave con una herida de bala. Fue entonces cuando se informó a la Policía Local de Granada, a la Policía Nacional y a los servicios sanitarios, que se desplazaron hasta el lugar de los hechos, donde finalmente se encontraron tres personas con impacto de bala.

Una vez allí, los efectivos sanitarios atendieron a dos heridos, que posteriormente fueron trasladados al hospital del PTS, mientras que no pudieron hacer nada por el tercer joven que se encontraba tendido en el suelo ya sin vida. Los agentes del grupo de Homicidios de la Policía Nacional acordonaron la zona comenzaron una investigación, que se encuentra bajo secreto de sumario, para esclarecer el incidente. Este hecho propició que la autoridad judicial no levantase el cadáver hasta las 14:15 horas, mientras que el perímetro estuvo acordonado hasta pasadas las tres de la tarde. Según fuentes policiales, el fallecido es un joven marroquí que hoy mismo habría celebrado su 22 cumpleaños.

Uno de los heridos, también marroquí, de 24 años de edad, es hermano de la víctima y, al cierre de esta edición, se encontraba en la Unidad de Cuidados Intensivos del PTS en estado muy crítico, tras haber recibido un impacto de bala en la cara. El otro de los evacuados, de 44 años, fue trasladado a la unidad de observación del PTS, con una herida de bala, de carácter grave, en la pierna. Tras los hechos, la Policía Nacional mantiene la zona vigilada, ya que aún no se ha efectuado ninguna detención.

Según algunas fuentes, las primeras hipótesis apuntan a que habría sido el herido de 44 años el autor de los disparos que acabaron con la vida del joven de 21 años y con el hermano de este herido de gravedad. Pese a ello, aún no hay confirmación oficial por parte de las autoridades encargadas de la investigación.

Se trataría de un hecho aislado, que no tiene conexión con el suceso del pasado 22 febrero, en el que un joven de 28 años falleció tras recibir un disparo en la cabeza, efectuado desde una furgoneta en marcha. Este hecho también está siendo investigado por la policía judicial, que ha emitido una orden de busca y captura, tras conocer la identidad del agresor.

Durante todo el día de ayer, se palpó la tensión en la zona ante el temor de los vecinos de que, al igual que ocurrió tras el asesinato del pasado febrero, los hechos de ayer también desencadenaran más altercados.