El origen del proyecto de ocio, cultural y comercial que estudia el Puerto de Sevilla, adelantado esta semana por este periódico, hay que buscarlo en Madrid. Su promotor es privado: la sociedad Impulsa Eventos e Instalaciones S.A. que gestiona el Palacio de Deportes de Madrid, donde participan empresas internacionales líderes en la organización de grandes conciertos y eventos deportivos tales como Octagon, Live Nation, Last Tour y RLM. Al menos las tres primeras confirmaron esta semana a este diario que efectivamente están en el proyecto sevillano.

En redes sociales como Twitterya se ha empezado a publicitar y hay un perfil creado con el nombre de Sevilla Park Ocio que en menos de una semana ha logrado más de 400 seguidores. Elperfil nació inicialmente como Sevilla Park Arena.

Según explican los promotores, todo comenzó cuando les llegó la noticia de que el Puerto de Sevilla quería desarrollar y poner en valor los suelos situados entre la carretera de la esclusa y el puente de las Delicias y se adelantaron a presentar un proyecto básico al Puerto, cuyos directivos aceptaron con gusto y lo vieron con buenos ojos. Con la obra del dragado del canal de navegación con escasos visos de prosperar a corto y medio plazo, el Puerto necesita ingresos. "Nosotros supimos que el Puerto quería poner en valor esos terrenos, vimos que había espacio en Sevilla para ese proyecto y se lo presentamos al Puerto", explican.

El Ayuntamiento de Sevilla había contratado meses atrás a la consultora Deloitte para captar inversores en la ciudad y en el Puerto. En otro municipio cercano a Sevilla los promotores también estuvieron viendo la posibilidad de instalar su proyecto, pero se decantaron por la capital porque "la localización en el Puerto tiene futuro y es extraordinaria", dicen.

Después de hablar con la Autoridad Portuaria presentaron el proyecto a las administraciones (Ayuntamiento y Junta de Andalucía), a los grupos políticos municipales y a las asociaciones empresariales. Fruto de estos encuentros su propuesta se ha ido mejorando con las aportaciones de las personas que lo han conocido. Incluso aseguran haber realizado un estudio de tráfico de la zona donde se implantará. Garantizan una inversión de 180 millones de euros en la que participarían "grandes inversores de España e internacionales".

Ninguna de las empresas promotoras quiere hablar de plazos en los que se podría inaugurar, ya que todo depende de cuándo pueda modificarse el Plan Especial del Puerto de Sevilla. E insisten en que ellos no entran en los trámites administrativos necesarios. Pero sí confirman que nunca han hablado de ponerlo en marcha en 2015 ni de que haya conciertos cerrados con grandes artistas. "Nosotros no hemos hablado ni de Beyoncé ni de Gagá, pero sí sabemos los artistas que pueden llenar estas instalaciones. No hemos cerrado conciertos de nadie porque no está hecho el edificio". Y aclaran que la negociación de los conciertos no empezará a abordarse al menos hasta que comiencen las obras. Y para eso no hay plazo cierto: "Cuando empiecen las obras se empezará a contratar. Hasta entonces no se pueden contratar conciertos", explican.

El único plazo que ofrecen es que el auditorio con capacidad para 21.000 personas podría construirse en 18 meses a partir del momento en que los suelos estén. "El equipode arquitectura dice que en 18 meses se puede hacer el auditorio una vez que los suelos estén disponibles",aclara.

Cuándo estarán listos los suelos es la clave. El delegado de Urbanismo aclaró esta semana que hay que modificar el Plan Especial del Puerto de Sevilla como paso previo para acoger este complejo de ocio que incluye noria gigante y zona comercial.

Los promotores del proyecto recalcan que saben a ciencia cierta que su iniciativa "va a funcionar; si no no estaríamos aquí". Y explican que así será de la misma forma que el Palacio de Deportes de Madrid "está ocupado al 90% con conciertos".

Rechazan los argumentos de quienes apuntan a que, en lugar de construir una nueva instalación, se reutilicen los auditorios infrautilizados que ya existen en la ciudad. Consideran que si hay instalaciones con bajo uso en la ciudad es porque posiblemente no cuentan con las empresas promotoras adecuadas que traen a los grandes artistas.

Opinan que en Sevilla hay demanda de una instalación de este tipo que acoja las grandes giras de conciertos con capacidad para 21.000 personas como máximo, por ser éste el aforo rentable, aclaran. En su opinión, el auditorio de la Cartuja Rocío Jurado, preparado para 8.000 personas al aire libre, tiene escaso aforo para ser rentable para las grandes giras.

Añaden que tampoco el Estadio Olímpico de Sevilla, con su aforo para 70.000 personas, puede incluirse como lugar rentable de conciertos. Explican que el estadio sevillano, como sucede con el de Barcelona, es una instalación deportiva "cuya adaptación a conciertos resulta carísima y no es rentable", ya que hay que montarle las estructuras de las que cuelgan los equipos y demás materiales. Por eso el estadio olímpico de Barcelona tampoco recibe conciertos.

Por contra, el auditorio que proponen en el Puerto estará preparado con estructuras propias y estandarizadas, con lo que no se disparan los costes por el montaje ni la adaptación. Otra característica de este auditorio es que se adaptará a conciertos de cualquier tamaño, en función del público de cada artista. Su propuesta es un auditorio que se puede transformar en tamaños variables según la demanda, desde 5.000 espectadores a 10.000 y 15.000, o llegar al máximo de 21.000.

Incluso han diseñado una sala para 1.500 personas dirigida a pequeños conciertos locales, así como locales de ensayo en los bajos de este gran palacio de la música.

Respecto a que haya una demanda real de público, las empresas promotoras señalan que el mercado andaluz es "muy importante" para ellos. Y lo es porque más de un tercio del público que acude a los conciertos que organizan en Madrid no son madrileños. "Sabemos quién compra las entradas del Palacio de Deportes de Madrid y sabemos que el 36% de los que vienen son de fuera de Madrid, mientras un 13% de este 36% son de fuera de España", explican.

Advierten que este tipo de instalaciones genera ingresos no sólo por la venta de entrada de las miles de personas que atrae un concierto. Esas personas tienen que alojarse en hoteles para hacer noche y consumen en los establecimientos de la ciudad. A eso se suman los centenares de empleos que son necesarios en la organización de cada concierto. "Esto es una industria", insisten.

Del papel a la realidad hay que ver qué sucede con este proyecto que por ahora sólo es un proyecto básico, pero visto con buenos ojos. Sobre todo, por los del Puerto, que ciertamente necesita ingresos tras el parón del dragado del río. Buena parte de los planes de expansión del Puerto de Sevilla se habían hecho depender de esta obra en el canal de navegación, pero con el triple rechazo que ha obtenido el proyecto de protección de las márgenes del estuario previo al dragado, las expectativas se desvanecen, al menos, a medio plazo. El Puerto necesita dinero para ampliar sus muelles hacia el Sur en las 100 hectáreas de la zona del Cuarto, lo que permitiría liberar de actividad comercial el Muelle de Tablada y convertirlo en zona de ocio y disfrute ciudadano, incluyendo el abandonado Puente de Hierro.

Las empresas que promueven Sevilla Park son potentes en el sector del ocio y aseguran contar con inversores internacionales. Y el Ayuntamiento no quiere despreciar una inversión millonaria de este calibre, por lo que se ha puesto a estudiar el trámite para cambiar el Plan Especial del Puerto.