Los análisis científicos que se han realizados sobre los restos de sangre hallados el pasado miércoles en la calle San Juan de Dios, en el barrio de Nervión, han confirmado que la sangre es de origen humano. El grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía continúa investigando este extraño hallazgo, según confirmaron fuentes policiales, que explicaron que en principio no se descarta "ninguna hipótesis" respecto al suceso que provocó que una persona perdiera tal cantidad de sangre.

La investigación, por tanto, continúa abierta y actualmente se están realizando pruebas de ADN a las muestras de sangre tomadas en la calle San Juan de Dios para tratar de identificar el perfil genético de los restos. Desde un principio, la Policía trabajó con la idea de que la sangre tenía que ser de una persona, dentro de las cautelas posibles y a la espera de la confirmación por parte del laboratorio de Policía Científica, que ahora ha confirmado el origen humano de las manchas de sangre.

La delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo, confirmó ayer que la Policía continúa investigando la procedencia de la sangre localizada en Nervión. "Es una cuestión curiosa que todo el mundo está esperando a ver qué ocurre y de dónde viene lo que se ha encontrado", afirmó Crespo en rueda de prensa.

El hallazgo de la sangre se produjo poco después de las diez de la mañana del pasado miércoles, cuando un vecino salió de su domicilio y se dirigió a su vehículo, que estaba estacionado junto al número 24 de la calle San Juan de Dios. El conductor se vio entonces sorprendido al ver las manchas de sangre que salpicaban el capó y la parte delantera de su coche, y también pudo comprobar cómo en el suelo había otros dos grandes charcos de sangre, uno debajo del radiador del vehículo y otro en la acera, junto al bordillo. El rastro de la sangre llegaba hasta un contenedor de basuras ubicado a unos 20 metros, en cuya parte externa había nuevas manchas de sangre.

El ciudadano alertó al servicio de emergencias 112, que avisó a la Policía Local. Los agentes desplazados al lugar comprobaron que en el contenedor no había nada, dado que la basura había sido recogida horas antes por la empresa Lipasam. Así se alertó a la Policía Nacional, que envió a agentes del grupo de Homicidios y de la Unidad de Policía Científica, quienes procedieron a inspeccionar los restos de sangre y a fotografiar el escenario de este insólito hallazgo.

A partir de ahí se revisó el camión de Lipasam que habitualmente realizaba esta ruta y se inspeccionó en la planta de tratamiento de Lipasam todos los residuos recogidos durante la jornada del pasado miércoles. Se ha comprobado asimismo que no hay denuncias por desaparición. De momento, la incógnita sobre de dónde procede la sangre se mantiene.