La acampada de los indignados se mantendrá hasta el próximo día 19 de junio. Para ese domingo están convocadas manifestaciones por toda España del movimiento 15M. La de Sevilla partiría de nuevo desde la Plaza de España y terminaría en la Encarnación, de donde se levantarían las tiendas al término de la marcha. Así lo decidieron los propios acampados en una asamblea celebrada la noche del sábado, que contó con la presencia de unas 350 personas. Esta decisión puede cambiar en los próximos días y ser revocada por nuevas asambleas.

Además, los acampados quieren hacer más patente aún su indignación con una protesta el próximo sábado 11 de junio, coincidiendo con la toma de posesión del nuevo gobierno local presidido por Juan Ignacio Zoido. Los manifestantes se concentrarán a las puertas del Ayuntamiento de Sevilla, en la Plaza Nueva, y todavía no han decidido cómo será la protesta que se llevará a cabo.

"Hemos pensado hacer una cadena humana que rodee el Ayuntamiento, pero eso está aún por decidir. Creemos que es un gesto simbólico muy bonito, el pueblo encadenando a sus políticos, que ese día es el único en el año en el que tienen que ir a trabajar. Por eso estaremos allí, porque nos gustaría verles la cara", explicó ayer a este periódico Antonio, uno de los portavoces del movimiento.

En el campamento de la Encarnación hay siempre aproximadamente medio centenar de personas. Durante el día acude mucha más gente y cada noche la población fluctúa. Hay quien se pasa todo el día en la acampada y no duerme en ella, quien va un rato y se va y quien sólo va a dormir. El campamento se organiza en secciones y todo se decide de manera asamblearia.

A diferencia de otros campamentos como el de Sol, las relaciones con los vecinos y comerciantes de la zona son muy buenas. La ventaja de la acampada de Sevilla es que está en la zona alta de las setas, esa que el alcalde inauguró como Plaza Mayor y cuyo rótulo ya ha sido sustituido por el de Plaza 15 de mayo, en referencia a la fecha en la que surgió el movimiento. "Nos cuidamos mucho de armar jaleo y evitamos que haya gente bebiendo a partir de las doce de la noche o perros sueltos. Además, los comerciantes están encantados con nosotros. Cada vez que hay una manifestación se llena la plaza y con ello los bares y cafeterías".

Mientras esperan al sábado para trasladar su protesta a la Plaza Nueva, los acampados llevan estos días la Spanish revolution a los barrios. Se están celebrando asambleas en distintas zonas de la ciudad y esta semana habrá noches en los que jóvenes de cada distrito se acerquen a dormir a la Encarnación. El sábado hubo un acto de la comisión de precariedad laboral en Pino Montano, mientras que bajo las setas se organizan distintos talleres.

También se ha formado una comisión de pueblos, que está aglutinando cada vez un mayor número de localidades de la provincia. Tomares, Mairena, Dos Hermanas, Alcalá de Guadaira, Marchena, La Puebla de Cazalla, Osuna, Castilblanco de los Arroyos, Écija y Gelves son municipios que están ya representados en la acampada de la Encarnación.