El arzobispo de Sevilla, monseñor Juan José Asenjo, ha expresado su profunda conmoción por la muerte del sacerdote Carlos Martínez Pérez, vicario parroquial de San Isidoro, quien ha fallecido en la tarde de este jueves, "víctima de una brutal agresión en la puerta de su domicilio, tras celebrar la eucaristía en la iglesia del convento de San Leandro, del que era capellán".

En un comunicado, el arzobispo de Sevilla, el obispo auxiliar, monseñor Santiago Gómez; el Consejo Episcopal y el Presbiterio sevillano expresan su profunda conmoción al conocer esta noticia, manifiestan su dolor y el de toda la Archidiócesis por esta "trágica pérdida", y ruegan una oración por su eterno descanso y el consuelo de sus familiares. Además, la Archidiócesis de Sevilla informa de que a esta hora el cuerpo del sacerdote fallecido se encuentra en el Instituto de Medicina Legal de Sevilla, y aún se desconocen la fecha y hora de la celebración de las exequias.

Carlos Martínez nació en Sevilla el 28 de noviembre de 1939 y fue ordenado sacerdote en mayo de 1972. Doctor en Historia y licenciado en Ciencias Económicas y Geografía e Historia, era vicario parroquial de San Isidoro, San Ildefonso y Santiago.