El alcalde de Sevilla, Juan Espadas (PSOE), ha señalado este lunes la "imposibilidad legal" de incrementar la plantilla de la sociedad municipal Limpieza Pública y Protección Ambiental (Lipasam), que habría perdido unos 180 efectivos en los últimos años, y aunque se ha mostrado partidario de acometer "mejoras" en los servicios de la empresa, ha reclamado "coherencia" al PP a cuenta de su papel en los problemas que arrastra Lipasam.

En declaraciones a los medios de comunicación, Juan Espadas ha avanzado los aspectos que abordará en la reunión que prevé celebrar este martes con el comité de empresa de Lipasam. La reunión, por cierto, se celebrará después de que Antonio Bazo (CCOO), portavoz del comité de empresa de Lipasam, admitiese "la falta de limpieza" que sufren múltiples calles de la ciudad, extremo que los trabajadores atribuyen a la amortización de plazas en la plantilla, la "herencia" del anterior Gobierno local del PP y a que el actual gabinete socialista "no ha movido ficha" para solucionar la situación.

En ese sentido, Espadas ha expuesto que su pretensión es debatir con el comité de empresa de Lipasam "cómo mejorar" los servicios de la empresa "en aquellos lugares donde los ciudadanos dicen que hay que incrementar la frecuencia de limpieza o donde se necesitan resultados más óptimos".

Y después de que el comité de empresa alertase de que Lipasam ha perdido 180 efectivos en los últimos años, Juan Espadas ha reconocido que la sociedad municipal de limpieza "debería" contar con más personal, pero ha alegado que las restricciones legislativas dictadas desde el Gobierno central del popular Mariano Rajoy en materia de recursos humanos "no permiten" realizar nuevas incorporaciones. "Yo estaría encantado de incorporar cien operarios más a Lipasam, pero lo imposibilita la Ley", ha enfatizado, reclamando "mayor flexibilidad" al Gobierno central del PP.

No obstante, el alcalde ha recordado que "una ciudad no sólo está más limpia cuanto más servicios de limpieza se acometen, sino también cuando se ensucia menos". Por eso, y dada la "imposibilidad" legal de incrementar la plantilla de Lipasam, ha apostado por "más campañas de concienciación y más implicación social" en "aquellos lugares que cuentan con una mayor frecuencia de limpieza pero que siguen sin estar suficientemente limpios".

El papel del PP

Pero sobre todo, Espadas ha señalado directamente las críticas del Grupo municipal del PP en cuanto al supuesto "deterioro" de los servicios de Lipasam, llamando a "no usar el trabajo de los operarios de Lipasam como arma política". Y es que según recuerda Espadas, los sistemas de trabajo vigentes en Lipasam y el modelo del servicio de limpieza de viaria fueron "implantados por el PP" en el pasado mandato, toda vez que la imposibilidad de incorporar nuevos efectivos deriva de las restricciones en la materia dictadas por el Gobierno central del popular Mariano Rajoy.

Por eso, ha reclamado "coherencia" a los populares, insistiendo en que en Lipasam habrá "mejoras si es que hay que hacer cambios", pero la labor de esta empresa municipal no puede convertirse en un "arma de confrontación política".