Mejorar la calidad de la red ciclista de 180 kilómetros que ya tiene la capital, actuando sobre los puntos más conflictivos, inseguros y transitados (sobre todo en la ronda histórica por ser el carril más usado por los ciclistas, como ya adelantó este periódico el 7 de agosto), conectarla con los principales intercambiadores de transporte (San Bernardo, Santa Justa, Plaza de Armas, Palacio de Congresos y Puerta Jerez) y construir aparcamientos seguros en esos núcleos de transporte son las prioridades del nuevo plan de la bici de aquí a 2020. Está redactado por completo a falta de su aprobación definitiva en la comisión municipal de la bici y en la Gerencia de Urbanismo próximamente. Este jueves se presentó con carácter oficial.

Manuel Calvo, experto en movilidad sostenible y ecología urbana que ha coordinado la redacción del plan de la bici junto con Javier Herrera, Nacho Galindo y Vicente Hernández, explicó este jueves por la tarde en reunión informativa en el Palacio de los Marqueses de la Algaba que es más urgente poner el énfasis en mejorar la calidad y eficacia de la red ciclista que en ampliar más kilómetros. La reunión fue presentada por el gerente de Urbanismo, Ignacio Pozuelo, y el responsable de la Oficina de la Bicicleta, Javier Huesa.

La reforma de los cruces conflictivos del carril está detallada en el plan, así como la mejora de los tramos inseguros más usados por ciclistas. En los últimos se incluye, aparte de la ronda histórica del Prado a Resolana, construir un carril del Paseo de Colón a Arjona suprimiendo el de madera que pasa junto a la dársena, ampliar el la Palmera (hacerlo de doble sentido), y reformar los de Carlos V y avenida del Cid, entorno de Santa Justa y conexión con el Palacio de Congresos, detalló Calvo.

No obstante, a corto plazo se construirán 10 kilómetros más de carriles sobre la SE-30 a la altura de Tablada-puente de San Juan (en obras), del Paseo de Colón a Arjona, de Valdezorras a Alcosa y, con fondos europeos DUSI, en San Jerónimo.

La memoria económica del plan ciclista prevé una inversión de 8 a 9 millones hasta 2020

Del presupuesto y memoria económica de este plan no se dieron detalles por parte del gobierno local. Pero se sabe que implica una inversión de ocho a nueve millones de euros de aquí a 2020 y que en 2017 hay 2,2 millones de euros presupuestados para las actuaciones ciclistas más inmediatas, aclaró este jueves a este periódico Javier Huesa, jefe del servicio de Sostenibilidad e Innovación Urbana del que depende la Oficina de la Bicicleta. Huesa asistió a la jornada informativa y por la mañana a la rueda de prensa.

El mantenimiento y conservación de carriles bici está asegurado con el contrato municipal que destina 350.000 euros al año. El plan jerarquiza en color rojo los carriles que requieren un mantenimiento más constante al recibir más cantidad de ciclistas.

Sobre los aparcamientos ciclistas, el plan prevé duplicar su número en la vía pública del centro de la ciudad usando la calzada, y colocarlos en los edificios residenciales, los centros de trabajo y estudios y los equipamientos públicos. Como ya se avanzó en su día, el primer aparcamiento seguro, de dos plantas, se construirá en el intercambiador de San Bernardo. La obra se licitará en las próximas semanas y la instalación (con un diseño similar al de ciudades ciclistas como Nantes o Burdeos) tendrá capacidad al menos para 250 bicicletas, informaron este jueves los delegados de Hábitat Urbano y Movilidad, Antonio Muñoz y Juan Carlos Cabrera en la rueda de prensa celebrada en el Centro Integral de la Bicicleta Sevilla Bike.

En este mandato se han habilitado 400 aparcamientos en la calle, se han tramitado contratos para instalar aparcabicis en colegios y un proyecto específico de 45 en la barriada de El Carmen.

Próximamente, se licitará un contrato con 300 unidades para toda la ciudad y una línea de subvenciones para la instalación de aparcabicis en comunidades de propietarios y edificios municipales.