La Gerencia de Urbanismo ha adjudicado esta semana el proyecto de restauración y conservación de la escultura del pintor Bartolomé Esteban Murillo, que se encuentra en la Plaza del Museo, frente al acceso principal al Museo de Bellas Artes. Se trata de unas de las actuaciones impulsadas desde el Ayuntamiento para conmemorar el IV centenario del nacimiento del pintor sevillano. La intervención, que ha estado precedida de un amplio y sesudo estudio, tiene un coste de 30.000 euros y durará tres meses. Además, en los últimos días también han finalizado las actuaciones en la estatua de Pastora Imperio, situada en la confluencia de las calles Velázquez y O'Donnell, y la del retablo cerámico de la calle Córdoba, que se encontraba en un mal estado de conservación y que luce de nuevo en su ubicación.

El retablo cerámico de la calle Córdoba.

La intervención en la escultura de Murillo, obra del artista madrileño Sabino de Medina y que preside la Plaza del Museo desde el siglo XIX, se centrará especialmente en la limpieza tanto del pedestal de piedra como de la propia figura del pintor. En el caso del pedestal, se procederá al sellado de las fisuras y de las uniones que están abiertas, así como al cosido de diferentes fragmentos. También se aplicará un producto consolidante y un tratamiento hidrofugante para garantizar la consolidación general y el buen mantenimiento futuro. En cuanto a la escultura, además se aplicará un tratamiento de eliminación e inhibición de la corrosión. Previamente a la redacción del proyecto técnico que se va a contratar, la Gerencia de Urbanismo realizó un estudio con metodología científica y cultural, con el objetivo de conocer la realidad de esta obra, que tuvo un coste superior a 5.000 euros.

Las actuaciones previstas tienen un coste estimado de 30.000 euros y un plazo de ejecución no superior a los tres meses.

El resultado final de la restauración de Pastoria Imperio y el estado previo.

La Gerencia también ha restaurado el panel cerámico que da nombre a la calle Córdoba y que desde 1908 ha permanecido instalado en la fachada de la torre de la iglesia del Salvador. La principal patología que presentaba era la ausencia por desprendimiento de dos piezas en el ángulo inferior derecho, así como pérdidas puntuales de la capa vítrea en algunas baldosas y pequeñas fracturas. Al estar continuamente expuesto a la intemperie, las piezas acumulaban polvo y suciedad además de algunos residuos adheridos en superficie, lo que había provocado un oscurecimiento generalizado de las piezas. El panel, tras tres meses de intervención, ha sido restituido hace pocos días a su ubicación original empleando el método tradicional, con mortero de cal y árido seleccionado para favorecer también su protección frente a la humedad.

El pasado jueves también concluyeron las tareas de conservación en la escultura de la bailaora Pastora Imperio. Realizada en bronce por el escultor Luis Álvarez Duarte, fue donada a la ciudad por la Duquesa de Alba e inaugurada el 13 de febrero de 2006. Al no haber sido intervenida desde su colocación, presentaba las patologías propias de su exposición a la intemperie durante todo este tiempo, como el lavado del bronce que provoca la lluvia, tiñendo la piedra en los puntos donde se producen escorrentías, la acumulación de residuos y, la existencia de corrosión y pátinas. Se ha procedido a la limpieza del conjunto, el sellado de fisuras y la aplicación de tratamientos anticorrosivo, de consolidación e hidrofugante.