La destrucción de empleo se frena pese al aumento del paro en 3.535 personas, un 1,72 por ciento, con respecto al mes de octubre. Tomando como referencia los datos interanuales, se comprueba que el crecimiento no se justifica tanto en la caída del empleo como en la incorporación de nuevos activos que antes no lo eran.

Así lo ha indicado en una nota la Delegación Provincial de la Consejería de Empleo de la Junta, que ha concretado que el paro registrado en las oficinas del Servicio Andaluz de Empleo (SAE) de la provincia, a fecha 30 de noviembre de 2010, presenta un aumento de 14.784 personas paradas más con respecto a la misma fecha del año 2009. 

Pese a lo negativo de la cifra, la Junta ha destacado que en el mes de noviembre de 2009 el colectivo de personas inscritas en las oficinas del SAE como paradas sin empleo anterior se cifraba en 19.597, mientras que actualmente este número asciende a 27.548, es decir, un 40,7 por ciento más.

De la misma forma, si se compara esta cifra con el total del aumento interanual (14.784), se comprueba que el 54 por ciento de dicho aumento no se debe a la destrucción de empleos, sino a la incorporación al mercado de trabajo de personas que nunca habían formado parte de él.

A esto hay que sumar el hecho significativo de que el 40,4 por ciento (11.134) de los 27.548 demandantes de primer empleo que hay actualmente tengan más de 44 años, un sector de demandantes que no venía siendo habitual. 

De otro lado, se señala una "importante" reducción del paro en aquellos sectores que mayor desempleo registraban a noviembre de 2009. Así, el sector servicios, que hace un año contaba con 22.000 parados más, ahora fija el aumento en 5.648. La construcción, por su parte, pasa de aportar 12.000 a los 256 de ahora, mientras que el paro de la industria, que creció en noviembre de 2009 en 3.000 personas, el mes pasado creó seis empleos.