La modificación de la ordenanza de la Feria de Abril para sancionar las botellonas en el real no ha registrado ninguna alegación, por lo que ha quedado aprobada de oficio tras el visto bueno recibido en el Pleno municipal de enero. El Ayuntamiento trata de poner orden en una zona –los aledaños de la portada– conflictivo en los últimos años que suele amanecer como un estercolero.

El nuevo artículo queda redactado de la siguiente forma: “Se prohíben las conductas que consistan en la permanencia y concentración de personas en espacios abiertos, que se reúnan para mantener relaciones sociales entre ellas, mediante el consumo de bebidas de cualquier tipo, establecidas en el art. 1.2 de la Ley7/2006, de 24 de Octubre de Andalucía, que alteren la seguridad colectiva u originen desórdenes, y asimismo cuando se produzcan en lugares en que pudieran obstaculizar la evacuación de personas, o el tránsito de los vehículos de emergencias”. Las botellonas en la Feria se considerarán infracciones graves de la ordenanza municipal, por lo que los agentes podrán imponer multas de entre 750 y 1.500 euros.

La exposición de motivos de la propuesta de introducción de un nuevo precepto en la normativa explica la necesidad de castigar estas nuevas prácticas: “La modificación de la ordenanza encuentra su justificación en la necesidad de adaptar la regulación de esta materia a las demandas sociales y a los cambios producidos en la realidad en la que se han de aplicar (descritas en el apartado de necesidades). Las normas han de dar respuesta a las nuevas necesidades que van surgiendo, lo que hace necesaria su modificación. En los últimos tiempos ha surgido una nueva forma de expresión del ocio, sobre todo por parte de los jóvenes, que supone la concentración de personas en espacios abiertos, para el consumo de bebidas, oír música, hablar y, en general, interrelacionarse”.