La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI-CSIF) lamentó la "vergonzosa manipulación política" a la que "está siendo sometido el caso" de los errores judiciales destapados tras la muerte de la pequeña Mari Luz, sobre todo ante las recientes manifestaciones realizadas desde "instancias políticas" en relación con las sanciones impuestas a la secretaria judicial del juzgado de lo Penal número 1 de Sevilla, Juana Gálvez, y del titular del juzgado, Rafael Tirado.

El sindicato informó en un comunicado de que "se está dando la circunstancia de que miembros del propio Gobierno no tienen pudor en manifestarse a favor de determinadas condenas, cuando lo apropiado sería no presionar de ningún modo a los organismos competentes para que se pronuncien en libertad y con Justicia".

"Es contradictorio que los mismos políticos que abogan por sanciones ejemplares, sean los que niegan, año tras año, medios personales y materiales a los órganos judiciales", prosiguió el sindicato, que insistió en que lo sucedido ha sido un "clamoroso fallo" de todo el sistema, "que va mas allá del estrictamente judicial", por lo que, a juicio de CSI-CSIF, "habrá que buscar soluciones sin desviar interesadamente la atención hacia dos personas concretas para ser convertidas en chivos expiatorios".

CSI-CSIF, por último, reiteró la "manipulación" a la que está siendo sometido este caso con el fin de "crear una cortina de humo para tapar el nefasto funcionamiento de la Administración de Justicia en España".