El arte abstracto e intelectual marcan desde sus inicios el trabajo de Inma Fierro, artista palaciega de 26 años que estos días expone en la Sala Maravilla la colección Idilio, una selección de sus obras más intimistas en formato grande. A través de sus diferentes piezas, el visitante se enfrenta a historias contadas desde la pintura: la amistad, lo cotidiano, las despedidas o el crecimiento personal. Su obra está basada en las emociones directas e indirectas que el inconsciente del artista proyecta en el lienzo. Licenciada en Bellas Artes por la Universidad de Barcelona, donde está realizando un máster de Creación Artística: Realismos y Entorno, la artista desarrolla al mismo tiempo su tesis doctoral en la Universidad Complutense de Madrid sobre la razón poética en el expresionismo abstracto. "Inicié mis estudios en Sevilla, pero echaba en falta un concepto más intelectual y filosófico del arte, y en Barcelona lo encontré". Inma Fierro acude a la lectura de maestros como García Lorca y Miguel Hernández para desarrollar su trabajo. De hecho, a pesar de lo conservador que puede parecer el tema en un principio, una de sus colecciones de reciente creación gira en torno al concepto de la tauromaquia. Idilio estará en Sevilla hasta el 30 de diciembre, aunque, actualmente también pueden verse sus obras en Jaén y Huelva. "Vivir de esto supone mucho sacrificio y el apoyo incondicional de la familia, que afortunadamente lo tengo".