Paraíso escondido es el título de la exposición que se inaugura el próximo martes en la Galería Birimbao. En ella, Ismael Lagares realiza un viaje pictórico por las fragancias del Mediterráneo a través de 16 pinturas sobre lino y papel que evocan, principalmente, las esencias y emociones que producen al artista los recuerdos de la tierra que lo vio nacer. La muestra puede visitarse hasta el próximo día 10 de julio.

Las marismas, la arena mojada del campo, el olor del rocío de la mañana, el azahar, el limón, las almendras amargas o el aceite de hojas de naranjo impregnan, de alguna manera, esta particular exposición. La perfumería emocional de Ismael Lagares se abre en composiciones botánicas, llenas de colores frescos pero intensos que, definitivamente, acentúan el deseo de acercar el eco de la naturaleza a la pituitaria.

En sus obras el artista experimenta, combina una abstracción de empastes densos, de fuerte impacto visual, con zonas más livianas, de tintes sensuales y sutiles. En esta ocasión, la carga pictórica que lo caracteriza se ha relajado ligeramente para resolver con rapidez trazos que arrastran una pincelada mucho más lírica y analítica de su entorno más inmediato. Alquimia pura, podría decirse, para la experiencia sensorial.

El trabajo de Ismael Lagares se encuentra expuesto en importantes colecciones privadas y también públicas. Desde sus inicios, el artista ha sido representado en ferias internaciones y en galerías españolas, aunque ha sido en estos últimos años cuando ha afianzado su proyección mas internacional, en países tanto de Latinoamérica como en los Emiratos Árabes.