Cuando parecía que las aguas volvían a su cauce y que ya quedaba atrás la polémica por los horarios e itinerarios que han marcado esta cuaresma, el presidente del Consejo de Hermandades y Cofradías, Carlos Bourrellier, no dudó este martes en aportar nuevos titulares sobre la jornada más problemática. El máximo representante de la institución cofradiera -en el transcurso de un desayuno organizado por el Grupo La Raza- dejó la puerta abierta a crear una segunda Madrugada como solución a la del Viernes Santo para dar cabida así a hermandades como la Macarena, cuyo crecimiento en número de nazarenos dificulta el tránsito por la carrera oficial en el tiempo establecido. La posibilidad la dejó entrever después de asegurar que este año volverá a realizarse un "conteo" de los integrantes de los cortejos, aunque en esta ocasión también se analizarán las "distintas velocidades" de las cofradías cuando van a la Catedral y cuando salen de ella, puesto que a la vuelta "hay algunas que tiran los horarios".

El hermano mayor de la Macarena, Manuel García, ya apuntó a la posibilidad de crear una segunda Madrugada (del Miércoles al Jueves Santo) "sólo" para esta masiva cofradía en una entrevista concedida a Diario de Sevilla en junio de 2013. Después del fallido intento por cambiar itinerarios y tiempos de paso de esta jornada para la próxima Semana Santa, el presidente del Consejo garantiza que "si la Macarena necesita otra Madrugada, que la pida". Afirmación que realizó sin ningún tipo de sorna ni ironía. "Manuel García lo planteó hace dos años y el Consejo no se lo tomó a broma. Este hermano mayor fue delegado municipal de Seguridad y sabe bien de lo que habla. No da puntada sin hilo", incidió Bourrellier, quien explicó dicha propuesta dentro de un sistema "que no se sostiene y puede morir de éxito".

"La Madrugada es la punta del iceberg, pero ya está ocurriendo con el Domingo de Ramos y el Martes Santo", refirió el presidente de las cofradías, que pide a las hermandades que abandonen una postura inmovilista y "abran la mente" a cambios de itinerarios y hasta de días. "En su momento se planteó que hubiera cofradías la mañana del Domingo de Ramos, sería una solución para aliviar otras jornadas", explicó Bourrellier.

Lo que para el Consejo está claro es que la Madrugada de 2016 no será igual a la de este año, un intento que también se propuso en 2014 y que, a última hora, ha caído en saco roto. "En la Madrugada de 2016 habrá cambios de orden sí o sí", aseveró Bourrellier, que minutos antes había explicado que cualquier solución que se le quiera dar a esta jornada no tendrá carácter "definitivo" y sólo temporal "año a año". Se trata, pues, de parchear un problema que crece cada Semana Santa con el incremento de nazarenos. Este año habrá 700 más, pero para 2016 la Macarena puede aumentar su cortejo en 1.000 nazarenos, pues en 2014, con motivo del Año Jubilar, se hicieron hermanos de esta corporación 1.500 personas. La hermandad macarena pondría en la calle 4.000 nazarenos, lo que deja sin efecto cualquier solución que se tome de antemano.

Ante este panorama, Bourrellier se niega a establecer numerus clausus en las cofradías. "No se puede castigar al capirotero, al que logra que esto se mantenga en pie pese a no ver a sus Titulares y aguantar grandes parones", defendió el presidente del Consejo, que abogó de nuevo "por cambiar el sistema actual de la Semana Santa".

Lo que no habrá serán dimisiones tras el fracaso de la Madrugada. Bourrellier achacó a "un cúmulo de circunstancias" el fallido intento y no se anduvo con rodeos: "Quien pida dimisiones, que se entere primero de los problemas que hay en su casa antes de meterse en la de los demás".