Cuarenta y cuatro minutos. Éste es el tiempo que se tarda desde Santa Justa a Benacazón en la línea regular de Cercanías C-5 que ayer comenzó a prestar su servicio. "Después de 40 años yendo y viniendo en coche, al fin voy a poder llegar a Sevilla sin atascos y sin preocuparme del aparcamiento. Es un alivio y, sin duda, mejor que ir en coche", relató Manuel Gutiérrez, un vecino de Benacazón que a media mañana de ayer decidió coger el tren, simplemente, para ir y venir. "No he querido dejar pasar los días y lo he probado hoy. El viaje compensa, mucho más que ir en autobús o en coche, ya que ganamos en tiempo y dinero". No es el único que piensa así. Todos los pasajeros mostraron ayer su acuerdo con esta nueva línea, que tendrá 41 circulaciones al día con una frecuencia de paso de 40 minutos en hora punta.

"Es más rentable. El autobús tarda 30 minutos mínimo, si no hay atascos, y nos deja en Plaza de Armas. Ahora tardamos 44 minutos y tenemos varias paradas para elegir: Santa Justa, San Bernardo o el Virgen del Rocío. Además, con lo que ha subido la gasolina, casi que nos interesa más ir en tren, ya que la ida y vuelta cuesta 4,35 euros ", comentó José Manuel Cabrera, otro vecino de Benacazón.

Más de una veintena de personas viajaron en el primer trayecto en tren a la ciudad. Hasta las 13:30, aproximadamente, unos 60 viajeros habían subido a los nuevos vagones, explicó uno de los vigilantes. Unos viajaban por trabajo o estudios. Otros lo hacían por mera curiosidad. Es el caso de Antonio Torres, de 91 años, que ayer disfrutaba de lo que era su primer viaje en tren. "Quién me lo iba a decir a mí, con la de veces que yo me he recorrido estos caminos andando o en burro. Bien lo podrían haber hecho antes, pero lo importante es que ha llegado", dijo este anciano, más conocido en su pueblo como El Alemán. "Al fin una cosa buena y grande en Benacazón. En mi pueblo nunca se ha hecho otra cosa mejor, por eso ahora esto nos parece muy grande y estamos muy contentos", afirmó Torres. "Fíjate las ganas que tenía de montarse en el tren que ayer -por el domingo- estaba malo y hoy se ha levantado espléndido", relató Dolores Salazar, la mujer que lo cuida y lo acompañaba en el viaje de ida y vuelta. Un trayecto con seis estaciones: Camas, Valencina-Santiponce, Salteras, Villanueva del Ariscal-Olivares, Sanlúcar la Mayor y Benacazón.

Francisco Montes y su mujer Juana Delgado viven en Bami y también tenían ganas de estrenar la nueva línea. "Venimos haciendo turismo por la provincia", contó Delgado, que disfrutaba del trayecto y de los paisajes, mientras su esposo no paraba de hacer fotografías. "Es un lujo y mucho más cómodo. Así se le facilitan las cosas y los trayectos a los estudiantes y trabajadores", declaró Delgado. "Sólo falta que la gente se conciencie y deje el coche en casa", puntualizó Montes. En la otra punta del vagón había un grupo de estudiantes -Martina, Inma, Lola y José Antonio- que se dirigían a la Facultad de Ciencias de la Educación, en Viapol. "Ya era hora que llegara esta línea. Ahora podremos salir más tarde de casa y no tendremos que coger ni autobús ni Metro al llegar a Sevilla. Es más rentable, más caro, pero tardamos menos tiempo".

Unos tienen claro que irán en tren al trabajo o a la universidad. Otros van a valorar si les interesa o no. "Es caro. Voy a valorar los horarios, ver el tiempo que tardo y ya veré qué me compensa más. En el autobús, desde luego, tardo mucho", afirmó María Luisa Martín.

Mucha curiosidad en todas las estaciones, pero donde más expectación había era en la última, en Benacazón, donde durante la mañana de ayer muchos vecinos se acercaron a preguntar, a pedir información, así como a visitar la nueva infraestructura. "Esto es una maravilla y nos va a venir muy bien para ir al Hospital Virgen del Rocío", relató María Oropesa. "Ya nos merecíamos una estación", concluyeron.