La empresa 'Farolillos Herrera', encargada de la fabricación de los farolillos para el Real de la Feria de Abril, tiene reservados más de 40.000 de estos adornos para su reposición en caso de viento o lluvia que estropeen algunos de los 180.000 ya instalados, en esta ocasión de color blanco y rojo anaranjado, ya que no hay ninguna mención especial como ocurrió en los últimos años con las celebraciones de los respectivos centenarios de los equipos de fútbol de la ciudad.

Pese a la reserva precisada por parte de la fecha y de las previsiones de fuertes lluvias y vientos en estos días de feria, la concejal de Fiestas Mayores del Ayuntamiento de Sevilla, Rosamar Prieto-Castro, explicó que los operarios tardan cinco días en reponer estos ornamentos cuando quedan "mojados y colgando", por lo que "si llueve la reposición con la Feria funcionando es muy difícil".

Así, los farolillos que queden en malas condiciones serán retirados por un retén especial y no se repondrán, algo que no afectará a la empresa, ya que desde ésta precisaron a Europa Press que siempre en un pedido así se incluye un número determinado como reserva por si el cliente, en este caso el Ayuntamiento, les solicita más material en estos días y por la premura que requeriría.

Cada año, el Consistorio encarga a la empresa que fabrica los farolillos un número determinado de los mismos para la reposición en caso de inestabilidad meteorológica y la decisión de reponerlos es exclusiva de los responsables de la Delegación de Fiestas Mayores del Ayuntamiento de Sevilla, añadieron desde 'Farolillos Herrera'.

En total, se han colocado en el Real 180.000 farolillos que combinan el blanco con el rojo anaranjado, unos colores que según explicó el responsable de la empresa sevillana que los ha fabricado, José Luis Herrera, se sustituyeron el año pasado por la combinación de verde y blanco debido a la conmemoración del centenario del Club de Fútbol Betis.

El blanco y el rojo anaranjado se ha utilizado tradicionalmente para los farolillos de feria desde que el padre de José Luis Herrera fundara esta empresa hace 68 años. La explicación de este uso se debe a que el rojo anaranjado "capta mejor la luz y este contraste favorece los rostros de las personas", apuntó Herrera.

A pesar de ello, esta combinación se cambió en la década de los 70, cuando la feria se trasladó al actual recinto de Los Remedios. Ese año se probó con farolillos que combinaban el blanco y rojo anaranjado con el verde, una mezcla que no se volvió a repetir porque, según él, "el verde queda mal".

En cuanto a los materiales, Herrera ha fabricado los farolillos con cola, papel, pegamento y tintaje "cien por cien europeos". De esta manera, su empresa se diferencia de los farolillos "procedentes de otros países como China que tienen una naturaleza más frágil", señaló.