TRAS romper el viernes con cuatro semanas de alzas, el Íbex 35 agravó ayer las pérdidas y se alejó aún más de los 11.000 puntos, una barrera que superó el jueves. El selectivo español debutó en la semana con una rebaja del 2,78%, que le sitúa en los 10.598,5 puntos, y fue el peor de los parqués continentales. En este escenario, el Cac parisino cedió un 2,13%, el Dax alemán un 2,02% y el FT100 un 1,46%.
Sólo una empresa, Grifols, logró evitar el rojo tras ganar un 0,90%. Los grandes valores fueron protagonistas del duro correctivo inflingido, especialmente los bancos. Iberdrola fue el menos malo con un recorte del 1,90%, Repsol cedió un 2,54% y Telefónica un 2,88%. Santander, que ultima un acuerdo con los sindicatos para cerrar sus oficinas los sábados con el objetivo de reducir costes y mejorar la conciliación laboral y familiar, se dejó un 3,15% y sus títulos ya cotizan por debajo de los diez euros (9,84 euros). BBVA retrocedió un 3,71%.
Popular tampoco tuvo su día (-4,07%), pero los más castigados fueron dos de los valores que más ganan en el año: OHL (-7,10%) y Sacyr Vallehermoso (-4,37%). También se situó entre los peores Técnicas Reunidas, que acumula las mayores ganancias del año (111%) pero que restó un 4,02%.
Las pérdidas de las inmobiliarias en la renta variable contrastan con el comportamiento del sector en el mercado continuo. Urbis subió un 67,38% y ya acumula una ascensión del 175% en tres sesiones. Les siguieron Afirma (+26,10%), Colonial (+24%), Metrovacesa (18,25%), Urbas (13,79%), Inbesós (13,64%) y Realia (9,87%).
El precio del barril de Brent cayó hasta los 69 dólares y, en el mercado de divisas de Fráncfort, el euro se situó sobre los 1,40 dólares.
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