NUNCA me explico cómo es posible que los 6 de enero, a mediodía, casi tres millones de espectadores se arremolinen en torno al 'Sorteo del niño', mientras a medianoche, a la hora de la apertura de las plicas del premio Nadal, nos quedemos en cuadro. Este año se ha vuelto a repetir la situación. Y por mucha TDT y por mucho libro electrónico que nos intente revolucionar la vida parece que así continuará siendo. La población envejece y los próximos seis de enero una mayoría seguirá pendiente de la señal del sorteo del niño. Otros de cómo visten los asistentes a la Pascua militar, mientras sólo unos cuantos esperaremos con ilusión a ver el rostro del agraciado con el Nadal.

Yo creo que el fallo de este premio literario me gusta tantísimo porque marca la hora en que se desconecta, automáticamente, el mecanismo de las navidades. Cero horas del siete de enero. Casi nada. Pero, sobre todo, porque casi nunca decepciona. Este año tampoco. Clara Sánchez nunca decepciona. La primera mujer que compareció en la tertulia cinéfila de José Luis Garci se entrega en cada una de sus propuestas. 'Lo que esconde tu nombre' es, desde el título, muy explícito en relación a la historia que pretende contar, la de las verdades y las apariencias. En esta ocasión sí vislumbro una película detrás de este relato, aunque otras propuestas de Sánchez también me parezcan tan adaptables como las de Almudena Grandes, hoy por hoy, la gran candidata a que todo lo que escribe se transforme en celuloide.

Mi favorita de Clara Sánchez es 'El misterio de todos los días', y sueño con verla en cine. Trata del amor como motor que mueve nuestras vidas. Ese sí que es una lotería